Crónica Aragón.

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Reanudan circulación a dos vías en la A-139 para restablecer el enlace con La Ribagorza y el valle de Benasque.

Reanudan circulación a dos vías en la A-139 para restablecer el enlace con La Ribagorza y el valle de Benasque.

HUESCA, 16 de abril. Este miércoles ha sido un día significativo para los conductores de la A-139, ya que la carretera ha reabierto sus puertas al tráfico con dos carriles disponibles en cada sentido. Esta reapertura llega tras un cierre completo que comenzó el 6 de abril, cuando un desprendimiento en el kilómetro 16,600, específicamente en la zona de Santaliestra, bloqueó el paso.

Al día siguiente del incidente, un equipo conformado por un geólogo y escaladores acudió al lugar para valorar la situación del terreno. Su informe reveló un elevado riesgo de nuevos desprendimientos, una preocupación acentuada por la proximidad de una torre eléctrica de alta tensión en la parte superior del talud afectado.

Dada la gravedad del riesgo, se decidió priorizar la seguridad de los automovilistas, lo que motivó el cierre de la ruta hasta la mañana de este miércoles. Durante el tiempo que la vía estuvo inoperativa, se permitió el acceso únicamente a vehículos de emergencia a través de uno de los carriles, y solo bajo estricta supervisión.

Después de evaluar diversas opciones, se tomó la decisión de construir un bypass que rodee el área dañada, ofreciendo una calzada de doble sentido como solución alternativa. Esto es preferible a un sistema de paso semaforizado que obligaría a los vehículos a detenerse alternamente. No obstante, los usuarios deberán reducir la velocidad en esta área como parte de las nuevas medidas implementadas.

Este enfoque provisional no solo facilita el tráfico, sino que también permite continuar con las labores de estabilización del talud y asegurar la torre eléctrica sin interrumpir nuevamente el flujo vehicular.

El director general de Carreteras e Infraestructuras del Gobierno de Aragón, Miguel Ángel Arminio, ha estado presente para supervisar la reapertura de la A-139 y ha expresado su satisfacción por la rapidez con la que se han llevado a cabo estas complejas obras, teniendo en cuenta las difíciles condiciones del talud en peligro.

Arminio también ha elogiado a todos los involucrados en la implementación de esta solución, que es crucial para restaurar el tráfico en una carretera vital para el acceso a la Ribagorza y al valle de Benasque, particularmente en una época del año en que muchos visitantes se preparan para disfrutar de unas merecidas vacaciones en el Pirineo.

La memoria técnica relacionada con el refuerzo del talud en el kilómetro 16,600 de la A-139 describe las distintas fases que se seguirán para asegurar la estabilidad de la ladera y prevenir futuros accidentes de este tipo.

Esta estrategia implica la utilización de un sistema mixto de sostenimiento, que incluye la inserción de bulones para unir las diversas placas de roca y la colocación de una red de cables de acero de alta resistencia dispuestos de manera intercalada, formando una malla de contención que se integra armónicamente con el entorno natural.

La obra se dividirá en siete etapas, comenzando con la limpieza y el saneamiento del área afectada, que incluye la remoción de escombros y bloques inestables. A esto le sigue la instalación de sistemas de seguridad para proteger a los trabajadores, así como la habilitación del paso provisional que ya se activó este miércoles.

Adicionalmente, se ha instalado una malla temporal para prevenir la caída de fragmentos durante las labores de perforación y se procederá al sellado de grietas en la zona cercana a la torre eléctrica. Esto ayudará a evitar infiltraciones de agua que puedan poner en peligro nuevamente la estabilidad de la base, la cual será reforzada mediante bulones de anclaje que mejoren la cohesión del terreno. Finalmente, se llevará a cabo el anclaje del talud y la instalación de la red de cables de acero.

La evolución y el avance de estos trabajos determinarán el tiempo necesario para restaurar el tramo afectado de la A-139 tras el desprendimiento del 6 de abril. Según cálculos preliminares, se prevé que la estabilización del talud y el restablecimiento del trayecto original podrían tardar alrededor de dos meses.