La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha estado presente en las celebraciones del Jueves Santo, participando activamente en la procesión de El Silencio y en la emblemática procesión de Cristo Atado a la Columna, dos de los dieciséis actos religiosos que han tenido lugar en la ciudad durante esta Semana Santa.

La procesión de El Silencio, que se desarrolla en el tradicional barrio de El Gancho, destaca por su atmósfera serena, donde el silencio solo se interrumpe por el tintineo de las insignias y los aplausos entusiastas de los asistentes, quienes reconocen el arduo trabajo que implica llevar a hombros las imágenes del Cristo de la Agonía y la muy querida Virgen Blanca.

Chueca ha querido ser parte de la procesión de La Columna, que este año presenta un cambio notable debido a las obras de remodelación que están en marcha en el entorno de la iglesia de Santiago, lo que ha alterado el recorrido habitual de este evento tan significativo para la comunidad zaragozana.