En un reciente desarrollo judicial en Zaragoza, se ha impuesto una estricta medida cautelar a un hombre acusado de haber agredido a su actual pareja con un arma blanca. La decisión, tomada por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de la capital aragonesa, incluye la prohibición del acusado de acercarse a la víctima a menos de 300 metros y cualquier forma de comunicación con ella.

La agresión, que tuvo lugar en la madrugada del 29 de enero en el distrito zaragozano de Delicias, llevó a la víctima a ser ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos debido a sus graves heridas. Este viernes, la Policía Nacional informó que el acusado fue puesto en libertad con cargos, después de haber comparecido ante el juez por un delito de homicidio en grado de tentativa, aunque optó por no declarar durante el procedimiento.

El Ministerio Fiscal solicitó al juez que se impusiera una condena de prisión y, de forma alternativa, se propuso una orden de alejamiento con control telemático. El hombre denunciado no presentó oposición a esta solicitud, permitiendo así que la justicia tomara medidas inmediatas para proteger a la víctima.

El juez ha evaluado las circunstancias familiares y laborales del investigado y ha decidido que este deberá comparecer en el juzgado los días 1 y 15 de cada mes, además de presentarse cuando sea requerido. La orden de alejamiento incluye la prohibición de acercarse no solo al hogar de la víctima, sino también a su lugar de trabajo y a cualquier otro sitio frecuentado por ella. Este rigor responde a la gravedad de las lesiones infligidas y a la necesidad de proteger a la denuncia

En la resolución judicial, se especifica que el investigado no podrá comunicarse de ninguna manera con la víctima, ya sea en persona o a través de medios telemáticos, redes sociales o terceros. Dichas restricciones estarán en vigor hasta que se resuelva el caso, ya sea por archivo o por una sentencia firme. No obstante, el juez aclara que en caso de encontrar a la víctima de manera fortuita, el investigado debe evitar cualquier contacto con ella, bajo pena de sanciones adicionales.

La víctima, quien fue hallada aparentemente herida de gravedad, experimentó múltiples cortes en brazos, cara y cabeza, siendo el más crítico un profundo corte en la mano que requería un torniquete que aplicaron los agentes de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana. La agresión fue reportada a la policía a las 7:00 horas de aquel miércoles, tras recibir varias llamadas de emergencia alertando sobre la discusión violenta.

Los agentes actuaron rápidamente y lograron localizar al presunto agresor en las cercanías del lugar del incidente. Posteriormente, la mujer fue trasladada al Hospital Clínico Lozano Blesa, donde recibió atención en la UCI, aunque afortunadamente su vida no corre peligro, según informan fuentes del Gobierno de Aragón.

El sistema judicial ha programado la toma de declaraciones para la víctima y dos testigos el próximo 13 de febrero en el juicio correspondiente a este caso, que ha generado una gran preocupación en la comunidad sobre la violencia de género y la necesidad de implementar medidas más efectivas para la protección de las víctimas.