En Zaragoza, la Policía Nacional ha llevado a cabo una exitosa operación que resultó en la detención de cinco jóvenes, cuyas edades oscilan entre los 18 y 33 años. Este grupo está señalado como responsable de una serie de robos de bicicletas y patinetes que tuvieron lugar en el área universitaria y en el distrito de Delicias.

Las autoridades han presentado cargos graves contra los detenidos, que incluyen pertenencia a una organización criminal, hurtos repetidos, ocupación ilegal, y defraudación en la conexión de servicios básicos como electricidad y agua. Esta información ha sido proporcionada por fuentes oficiales que están al tanto del caso.

La operación se inició tras recibir múltiples denuncias que alertaban sobre la desaparición de más de 100 vehículos de movilidad personal, con un daño económico que supera los 42.000 euros. Los afectados eran en su mayoría estudiantes universitarios que dependían de estos medios de transporte para su día a día.

Los robos se concentraban en ubicaciones frecuentadas por estudiantes, tales como el campus universitario, la Escuela de Idiomas y el Hospital Clínico, además de institutos como Santiago Hernández y Miguel Catalán en Delicias. Esto pone de manifiesto la vulnerabilidad que enfrentan los jóvenes en su rutina diaria.

Los ladrones operaban en pequeñas células, cada una con un rol bien definido y mostrando una evidente coordinación. Se aprovechaban de la afluencia en la mañana durante los días laborables, empleando herramientas como cizallas, tenazas y ganzúas para eludir los sistemas de seguridad de las bicicletas y patinetes.

Los investigadores no tardaron mucho en rastrear a los responsables, identificando al menos 16 hurtos atribuidos a este grupo, cuyos integrantes ya contaban con un historial delictivo similar. Se estableció que residen en un local ocupado en la calle Nuestra Señora de Covadonga, en el mismo distrito de Delicias.

El 29 de abril, después de obtener el visto bueno judicial, las fuerzas de seguridad, con la colaboración de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) y el Grupo de Atención al Ciudadano (GAC), realizaron un registro en el local. Durante la operación, se confiscaron numerosos objetos robados, que van desde bicicletas y patinetes hasta herramientas y dispositivos electrónicos. Además, se descubrió que el local estaba vinculado de manera ilegal a las redes de luz y agua.

Los cinco detenidos, que acumulan más de 30 antecedentes por delitos similares, fueron presentados ante el juzgado de guardia, donde se les ha concedido la libertad provisional bajo ciertas condiciones.

Sin embargo, poco tiempo después de la intervención policial, se registraron intentos por parte de algunas personas de volver a ocupar el local. Gracias a la rápida respuesta de las autoridades, se logró evitar una nueva usurpación del espacio.