ZARAGOZA, 21 de abril.

El arzobispo de Zaragoza, Carlos Escribano, ha expresado su profundo pesar por la muerte del Papa Francisco, recordando la intensa labor del Pontífice en servicio de la Iglesia y su papel guiado por el Espíritu Santo. Durante una misa en la basílica del Pilar, Escribano animó a todos a rezar y encomendar al "Señor" la acogida de este "Papa bueno" en el cielo.

La noticia del fallecimiento de Jorge Mario Bergoglio, quien lideró la Iglesia desde 2013 con el nombre de Francisco, fue confirmada por el Vaticano esta mañana. Escribano, conmovido, realizó un responso en su honor, sumándose al duelo que caracteriza a la comunidad católica en estos momentos difíciles.

El arzobispo ha recordado que, en la bendición "Urbi et Orbi" del Domingo de Pascua, el propio Papa hacía un llamado a la oración por la paz mundial, instando a los fieles a unirse en su intención de cesar las guerras y promover la convivencia pacífica, ya que el "Príncipe de la Paz", resucitado en la cruz, debe reinar en la Tierra.

En sus declaraciones, Escribano subrayó la importancia de la esperanza en tiempos de tribulación, haciendo referencia al próximo jubileo de 2025, un evento que el Papa había pedido que se enfoque en ser "peregrinos de esperanza". Este mensaje resuena, según el arzobispo, con la promesa de que el Señor nunca defrauda a aquellos que creen.

Escribano mostró su fe en que el abrazo divino que ahora rodea al Papa Francisco le permita contemplar la esperanza que vive en el corazón de cada creyente. Su mensaje fue claro: "Encomendamos al Santo Padre a la Virgen del Pilar, quien siempre ha estado cerca del Papa", pidiendo, a su vez, oraciones por el eterno descanso de Francisco y reconocimiento por los actos benévolos que realizó a favor de la Iglesia y la humanidad. "Rezad por él", concluyó el arzobispo con solemnidad.