ZARAGOZA, 19 Sep. - Quirónsalud Zaragoza ha sido pionero en Aragón al introducir la técnica quirúrgica de la enucleación prostática con láser de holmio (HoLEP) para tratar la hiperplasia benigna de próstata (HBP), una condición no cancerosa que provoca el agrandamiento de la próstata, una glándula situada debajo de la vejiga y alrededor de la uretra masculina. Este agrandamiento provoca la compresión de ambas partes y bloquea el flujo de orina.

En la actualidad, se estima que la HBP afecta a un 60% de los hombres mayores de 60 años, y aumenta con la edad, llegando a afectar al 90% de los hombres mayores de 70 años.

Esta innovadora técnica consiste en la extirpación de casi todo el tejido de la zona central de la glándula, que es la causa de la obstrucción urinaria, a través de la uretra utilizando un láser que separa esta área central de la periférica.

A continuación, esta parte se empuja hacia el interior de la vejiga, donde se fragmenta mediante el uso de un instrumento llamado morcelador y se extrae el tejido sin necesidad de realizar incisiones.

El equipo médico del servicio de Urología del Hospital Quirónsalud Zaragoza, compuesto por los doctores José Manuel Sánchez Zabalardo, Ángel García de Jalón Martínez, Joaquín Navarro Gil, Raquel Espílez Ortiz, Mónica Sanz del Pozo y Teresa Cabañuz Plo, es el primero en la comunidad aragonesa en utilizar este tratamiento.

"Las principales ventajas de esta técnica son que es mínimamente invasiva, el paciente se recupera mejor, se recomienda en próstatas de mayor tamaño, produce menos sangrado que otras cirugías y reduce la posibilidad de una reintervención en el futuro en comparación con otros procedimientos", explicaron desde el equipo médico de Urología de Quirónsalud Zaragoza.

En este sentido, la operación es más sencilla: "Se realiza bajo anestesia epidural y dura entre 60 y 120 minutos. Además, requiere un ingreso hospitalario más breve y es posible el alta entre las 24 y 48 horas posteriores en la mayoría de los casos, lo que permite una recuperación más rápida. Por lo general, este tipo de terapias tienen menos complicaciones que otras técnicas quirúrgicas", concluyó el equipo médico del centro hospitalario.

En general, esta enfermedad no está relacionada con el cáncer ni aumenta el riesgo de desarrollarlo, pero los síntomas que causa pueden afectar la calidad de vida de los pacientes.

Asimismo, en casos avanzados, puede provocar infecciones del tracto urinario, retención aguda de orina con necesidad de sondaje vesical o incluso insuficiencia renal, según informaron desde Quirónsalud.