ZARAGOZA, 15 de mayo. El Pleno de las Cortes de Aragón ha tomado una postura firme en contra de cualquier modificación en la Lonja de Zaragoza, limitando cualquier intervención únicamente a actividades de conservación o restauración. El proyecto propuesto por el Gobierno municipal fue desestimado con el apoyo unánime de los partidos, a excepción del Partido Popular, que expresó su oposición.

La propuesta del PSOE ha urgido a las autoridades regionales a proteger la integridad de la Lonja, declarada Bien de Interés Cultural, instándolas a evitar cualquier cambio que comprometa su actual estructura y funcionalidad cultural. Esto incluye la prohibición de alteraciones en el suelo o la instalación de nuevas puertas que puedan comprometer el monumental edificio.

Por su parte, CHA ha hecho un llamado a la acción para asegurar el respeto absoluto a la Ley de Patrimonio Cultural de Aragón, demandando que se detenga cualquier proyecto que no responda a necesidades de conservación. Destacan que todas las intervenciones deben estar justificadas y alineadas con las normativas pertinentes.

Además, han manifestado su oposición al plan del municipio, que incluye modificaciones internas y la introducción de elementos contrarios a la ley patrimonial, lo cual podría resultar en la compartimentación del espacio y el cambio de su pavimento, además de un nuevo acceso que alteraría su esencia.

Desde CHA, también se ha pedido un escrupuloso respeto a la integridad del monumento, esencial para la candidatura de las lonjas de Zaragoza, Valencia, Palma de Mallorca y Barcelona para ser declaradas Patrimonio Mundial de la UNESCO. Alertan que cualquier cambio significativo puede poner en peligro dicha postulación.

Carmen Dueso, del PSOE, ha criticado el enfoque de la alcaldesa, Natalia Chueca, fundamentando que el proyecto es excesivamente intrusivo y afectaría tanto el interior como el exterior del edificio, lo cual va en contra del acuerdo de las Cortes de conseguir el estatus de patrimonio de la humanidad.

Isabel Lasobras, diputada de CHA, ha demandado al Gobierno de Aragón que respete las leyes de protección del patrimonio y que frene el plan de reforma promovido por el Ayuntamiento. Enfatiza que conservar la Lonja es una obligación moral, apuntando que su partido apoya el reconocimiento internacional de otros edificios emblemáticos junto a la Lonja zaragozana.

Desde el Partido Popular, Ester Artieda ha denunciado que PSOE y CHA están utilizando este tema como una herramienta política para desacreditar al gobierno local, alegando que no reconocen la importancia cultural de la Lonja y que se oponen a las mejoras que se proponen.

Carmen Rouco, en nombre de Vox, ha abogado por la defensa de la Lonja, catalogándola como un patrimonio irremplazable. Criticó el proyecto del Ayuntamiento por considerarlo invasivo y sin justificación técnica, lo que podría destruir la posibilidad de reconocimiento de la UNESCO.

Tomás Guitarte de Teruel Existe, destacó que la Lonja es un símbolo arquitectónico que debe ser protegido, asegurando que su valor es suficiente para atraer visitantes y que merece ser considerada al mismo nivel que otras lonjas en el país.

Álvaro Sanz de IU ha defendido la necesidad de una adecuada conservación del edificio, resaltando su valor para la comunidad. Se mostró de acuerdo en que su uso puede ser compatible con diversas actividades y reiteró el apoyo a su reconocimiento como patrimonio de la humanidad.

Desde el PAR, el diputado Alberto Izquierdo ha sido claro: si el proyecto de la alcaldesa infringe la ley, el Departamento correspondiente no permitirá que avance, recordando que ningún ayuntamiento está por encima de las normativas patrimoniales.