En una importante sesión plenaria celebrada el 10 de abril en Zaragoza, las Cortes de Aragón han mostrado un decidido respaldo a la creación de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) para la cereza de las comarcas de Calatayud y el Aranda. Este fruto se considera uno de los máximos referentes de la oferta agrícola aragonesa y su reconocimiento formal ha sido objeto de una declaración institucional aprobada por unanimidad.

Marta Fernández, presidenta de las Cortes, subrayó la importancia de este gesto, afirmando su "firme compromiso" con la IGP de la cereza, que representa un avance crucial para la valorización de uno de los productos más representativos de la comunidad autónoma.

La declaración institucional resaltó que la cereza de estas comarcas, conocida por su calidad impecable y características distintivas, debe contar con el respaldo necesario para ser protegida y promovida tanto a nivel nacional como internacional. Se espera que la IGP no solo resguarde la calidad del producto, sino que también impulse la economía local, fortaleciendo el sector agrícola y creando nuevas posibilidades de negocio para los productores.

Asimismo, se ha enfatizado que el establecimiento de la IGP busca posicionar la cereza de Calatayud y el Aranda como un estándar de calidad en el mercado. Esto permitirá a los agricultores acceder a nuevas oportunidades comerciales, potenciar su competitividad y garantizar la sustentabilidad de sus actividades productivas.

El Parlamento ha instado a las instituciones relevantes a "acelerar los trámites" necesarios para formalizar la IGP y a proporcionar el apoyo técnico y económico indispensable, a fin de convertir este proyecto en una realidad en un futuro cercano.

Se ha destacado que la cereza de Calatayud y el Aranda es un verdadero patrimonio de la región, y su preservación y promoción son esenciales para el desarrollo futuro de las comunidades locales. A través de este reconocimiento, se busca también conservar tradiciones arraigadas y fomentar el avance rural, beneficiando a toda la población de estas comarcas.

Finalmente, el Parlamento autonómico reafirmó su compromiso con la causa de la IGP y agradeció a todos los agricultores, asociaciones y organizaciones que están trabajando arduamente para hacer viable este proyecto. "Juntos podremos lograr que la cereza de Calatayud y el Aranda tenga el reconocimiento que verdaderamente merece en el ámbito agrícola y comercial de España y Europa", concluyó la declaración.