En la capital aragonesa, más de 40 comercios se han interesado por la marca "Huerta de Zaragoza". Esta marca, impulsada por el área de Economía, Innovación y Empleo del Ayuntamiento de Zaragoza y la Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón, UAGA-COAG, cuenta con su identificación para reconocer a los productos cultivados en la huerta de la ciudad. La marca abarca tanto la zona de huerta tradicional de Zaragoza como los barrios rurales y hasta un radio de unos 50 kilómetros de la capital.

La identificación comienza en origen en las pequeñas explotaciones hortícolas y fue surgida como un proyecto piloto. La implantación en distintos establecimientos ha sido progresiva y de los trece que comercializaban estos productos a los quince días de crearse la marca, ya se superan los 40, que se localizan por todos distritos de la ciudad.

El miembro de la ejecutiva de UAGA-COAG y responsable de este proyecto, Javier Fatás, ha explicado que todo lo que se consume es de temporada y que los productos de invierno, como la borraja, acelga, coles y cardo, son los "productos estrella y más demandados". Además, a partir de esta fecha, comienza la cosecha de hortalizas de verano que "son muy demandadas por los consumidores" como el de tomate, pepino, pimiento y calabaza.

Sobre el perfil del consumidor que se decanta por la marca "Huerta de Zaragoza", Fatás ha dicho que predominan los de mediana edad, entre los 40 y los 50 años, y, en general, es un tipo de público que "apuesta por un consumo de cercanía y sostenible y ven que lo tienen ahí cerca".

El siguiente paso es que los pequeños agricultores diversifiquen los cultivos porque hay productos "más abandonados al venir de otras zonas a mejores precios". "Hay que apostar por esos productos que se habían dejado de lado", indica Javier Fatás. También subrayó que la clave es diversificar en lugar de especializarse porque si el agricultor diversifica su producción favorecerá que haya más variedad en los puestos de los detallistas.

"Las peticiones de nuevos agricultores que se quieren sumar a esta marca es constante", indicó Javier Fatás. Además, destacó el papel que también lleva a cabo la Asociación de Detallistas y la plataforma Huerta de Zaragoza.

Los productos "Huerta de Zaragoza" no tienen por qué ser más caros, sino que la cadena es más corta porque se vende al detallista sin recurrir a grandes distribuidoras donde el producto pasa por más eslabones de la cadena, que es lo que encarece el producto. En definitiva, se puede decir que esta marca apuesta por un consumo local y sostenible, beneficiando tanto a pequeños agricultores como al consumidor final.