HUESCA, 25 de abril. La alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, ha compartido su entusiasmo tras la reciente actuación de la Agrupación de Danzantes de Huesca en Roma, un evento que se había visto amenazado por el luto oficial a causa del fallecimiento del Papa. A pesar de las complicaciones iniciales, la delegación de 400 oscenses pudo finalmente rendir homenaje al patrón San Lorenzo con sus tradicionales bailes cerca de la histórica Basílica de San Lorenzo Extramuros.

Este viaje a la capital italiana se había programado con la intención de honrar la memoria del patrón de Huesca. Sin embargo, la prohibición inicial de bailar durante el periodo de luto generó desilusión entre los participantes. Fue tras persistir en las gestiones que se logró obtener el permiso necesario para llevar a cabo la actuación, lo que permitió que el 25 de abril se convirtiera en un día memorable para la comunidad oscense.

La alcaldesa Orduna, quien lideró la delegación, expresó su alegría y satisfacción, destacando que "hoy ha sido una jornada muy especial". Mencionó que hasta el último momento se mantuvo la incertidumbre, pero como “una buena aragonesa y oscense”, se mostró decidida a conseguir que el espectáculo se realizara. “Hemos hecho historia otra vez”, agregó con orgullo.

El luto oficial en Roma había supuesto un obstáculo significativo para los danzantes durante las jornadas laurenzianas. No obstante, la colaboración de las autoridades locales, que accedieron a habilitar un espacio en la plaza donde se pudiera bailar sin infringir el entorno sagrado, fue crucial para el éxito del evento.

Previo al baile, se guardó un respetuoso minuto de silencio en honor al Papa Francisco, viviendo un momento cargado de emoción y solemnidad. La actuación de los danzantes, que se extendió por 20 minutos a las 9:15 horas, fue acompañada por un grupo de oscuenses que acudió ataviado de blanco y portando pañoletas verdes, mostrando su orgullo y pertenencia a la tradición local. Como reconocimiento a su esfuerzo y dedicación, los danzantes hicieron entrega de una pañoleta a la presidenta del Distrito Roma II, Francesca del Bello, en un gesto de agradecimiento por la oportunidad de celebrar su cultura en un lugar tan emblemático.