Estudiantes de Medicina y Enfermería han tenido la oportunidad de formarse este verano en centros de salud rurales de Aragón gracias al programa 'Desafío'. Este programa, impulsado por las diputaciones provinciales de Zaragoza, Huesca y Teruel junto con la Universidad de Zaragoza, ha permitido a 33 estudiantes participar en prácticas en colaboración con el Servicio Aragonés de Salud.

En esta ocasión, 23 estudiantes de Medicina y diez estudiantes de Enfermería han tenido la oportunidad de formarse, como es el caso de Alba Achón, una estudiante de la Universidad de Zaragoza que ha realizado sus prácticas en el centro de salud de Cantavieja en la provincia de Teruel bajo la tutela de las enfermeras Silvia Rico y Noelia Monfort.

El programa ha sido elogiado por destacar la importancia de que los estudiantes de carreras sanitarias conozcan de cerca el trabajo en entornos rurales para desarrollar sus capacidades profesionales en el futuro.

La colaboración de los centros de salud rurales, profesionales tutores y las instituciones financiadoras como las diputaciones provinciales han sido fundamentales para el éxito de estos programas. Alba Achón ha destacado que su experiencia en un centro de salud rural le ha permitido adquirir autonomía y resolver situaciones de forma más eficaz.

La estudiante ha subrayado la importancia de la cercanía con los pacientes y ha expresado su interés en seguir desarrollando su carrera en el ámbito rural una vez finalizada su formación académica.

El programa 'Desafío' se ha implementado en las tres provincias aragonesas, con un enfoque especial en la provincia de Huesca, que desde el año pasado ha establecido un programa específico para estudiantes de Medicina y Enfermería en centros de salud rurales.

Esta iniciativa ha permitido que 165 alumnos pudieran formarse y trabajar en entornos rurales este verano, con un impacto significativo en la representación de sanitarios en las prácticas realizadas.

La colaboración interinstitucional y el apoyo económico de las diputaciones provinciales son clave para el éxito continuo de estos programas, que han demostrado ser pioneros y ejemplares en el fomento de vocaciones sanitarias en zonas rurales.

La satisfacción de los participantes y las recomendaciones positivas de estos programas reflejan el valor y la relevancia de esta iniciativa para el futuro de la sanidad en Aragón y en todo el país.