El pasado 22 de junio en Zaragoza, dos valientes agentes de la Policía Nacional protagonizaron un heroico rescate al salvar la vida de un hombre de 90 años que estaba sufriendo un atragantamiento en su hogar.

El incidente se produjo el martes 17 de junio, cuando una cuidadora, preocupada por la situación, contactó al CIMACC 091 para informar sobre el grave estado de salud del anciano. Inmediatamente, una patrulla que se encontraba en la zona se dirigió al lugar para ofrecer asistencia.

A la llegada de los agentes, identificados como Jonathan y Manrique, se encontraron con el hombre en la cocina de su casa, visiblemente asfixiado y con serias dificultades para respirar debido a un trozo de naranja que había quedado atascado en su garganta.

Sin perder tiempo, uno de los policías aplicó la maniobra de Heimlich, una técnica de primeros auxilios crucial en estos casos. Después de varios intentos, logró desobstruir las vías respiratorias del hombre, permitiéndole expulsar el objeto que le impedía respirar.

Gracias a la rápida y efectiva intervención de los agentes, el anciano pudo estabilizarse y comenzó a recuperar su respiración poco a poco hasta que una ambulancia del servicio de Bomberos llegó para brindar atención adicional.

La maniobra de Heimlich, utilizada en situaciones de atragantamiento, consiste en rodear a la persona afectada desde atrás y ejercer una serie de compresiones rápidas en el abdomen, generando la presión necesaria en el diafragma para expulsar el objeto obstructivo.