El representante de Vox en las Cortes de Aragón, Alejandro Nolasco, ha hecho un llamado al Gobierno regional para instaurar una Policía Local mancomunada en la comarca del Bajo Aragón. Este cuerpo integraría a los municipios de Alcañiz, Caspe, Calanda y Alcorisa, con la posibilidad de incluir a otras localidades cercanas que deseen unirse.

Nolasco hizo este anuncio durante una rueda de prensa en Alcañiz, donde estuvo acompañado por Carlos Andreu, concejal de Vox y encargado del área de Patrimonio Cultural. Esta propuesta será presentada oficialmente en el próximo pleno de las Cortes autonómicas.

El coste previsto de esta iniciativa asciende a 3 millones de euros, y se contempla la creación de un cuerpo policial compuesto por 71 agentes que atenderían a una población de 33.000 habitantes distribuidos en un área de 1.200 kilómetros cuadrados. Para dar contexto, Nolasco señaló que esta inversión equivale a un tercio del presupuesto del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM).

El portavoz argumentó que esta medida ha surgido como respuesta a la necesidad de "mejorar la eficiencia en la gestión de los recursos públicos y proporcionar mayor seguridad y rapidez en la actuación" en una región que ha sido "particularmente impactada por la delincuencia relacionada con la inmigración ilegal masiva".

Durante su intervención, Nolasco expuso la grave situación de inseguridad que enfrentan los ciudadanos, resaltando que "no se sienten seguros en las calles" y mencionando la proliferación de actividades delictivas como el tráfico de drogas, además de la falta de controles por parte de las autoridades locales. Accusó al Ayuntamiento de Alcañiz de alegar una falta de presupuesto, a la vez que criticó la inacción del Gobierno de Aragón en cuanto a la protección de la población.

Calificó como "escandaloso" que los detenidos del Bajo Aragón deban ser trasladados hasta la ciudad de Teruel por la falta de calabozos en Alcañiz, un problema que se ve agravado por la pérdida de otros 60 efectivos de la Guardia Civil en la provincia. Además, hizo referencia al cierre reciente del cuartel de la Guardia Civil en Ariño, lo que ha dejado más del 20% de las plazas vacías en la región.

Nolasco no escatimó críticas hacia el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a quien tildó de "cobarde" por no abordar la actual situación de la Guardia Civil en Teruel durante su visita a Zaragoza para inaugurar un nuevo acuartelamiento.

El portavoz hizo hincapié en un escenario donde la única patrulla de Policía Local en servicio se enfrenta a una situación de alteración del orden público y se ve obligada a solicitar apoyo de la Guardia Civil, una acción que no siempre es factible por la escasez de recursos.

Criticó la normativa vigente que impide que las patrullas de diferentes municipios se refuercen entre sí, dejando a los agentes en situaciones de desventaja ante incidentes graves. Propuso que la colaboración entre las policías locales de la zona podría mejorar significativamente la seguridad y la capacidad de respuesta ante emergencias.

El modelo de Policía Local mancomunada se apoyaría en la Ley 7/1999 de Administración Local de Aragón, que fomenta mancomunidades para potenciar recursos en áreas rurales. También citó la Ley Orgánica 2/1986, que permite la formación de cuerpos policiales por asociaciones municipales.

Además, mencionó que la Ley 8/2013 de Coordinación de Policías Locales promueve la creación de agrupaciones para garantizar la profesionalización y coordinación de los cuerpos policiales. Según Nolasco, esta estrategia ayudaría a abordar los problemas de personal en la zona, sugiriendo que se podrían ofrecer incentivos para atraer a nuevos agentes.

Al ser preguntado acerca de la propuesta del PAR, que plantea una policía autonómica, Nolasco argumentó que ello se asemeja más a los modelos de las policías forales vascas o navarras, algo que consideró "inasumible". En cambio, defendió su plan de agrupar las fuerzas policiales locales, criticando a los aragonesistas por sus intentos de replicar un modelo que no se ajusta a la realidad de la comunidad.

A pesar de las limitaciones presupuestarias, subrayó que no se debe resignar a la inacción. "Estamos hablando de 3 millones de euros en un presupuesto que supera los 8.000 millones. Esto es una propuesta viable; hablar de una policía autonómica es simplemente una ilusión", concluyó Nolasco.