La pintoresca localidad de Aínsa, ubicada en la comarca de Alto Aragón, se prepara para reabrir al tráfico la carretera que conduce a su emblemática villa medieval a partir del lunes 14 de abril. Esta reapertura, resultado de la declaración de emergencia ante los trabajos de reparación tras el colapso de una ladera, se llevará a cabo justo a tiempo para la llegada de numerosos turistas que tradicionalmente visitan el lugar durante la Semana Santa.

Desde este lunes al mediodía, el paso estará habilitado de manera provisional en ambas direcciones, superando así las limitaciones impuestas por los semáforos que actualmente regulan un solo carril. Esta medida tiene como objetivo facilitar el flujo vehicular durante uno de los puentes festivos más importantes del año.

Los trabajos de restauración están a cargo de Excavaciones ACB, una empresa local que ha realizado grandes avances en la construcción de un muro de escollera de seis metros de profundidad, destinado a prevenir futuros deslizamientos. Asimismo, están realizando labores de hormigonado para asegurar una superficie adecuada para el tránsito vehicular.

Gracias a la cooperación de los propietarios de una finca adyacente, la carretera ha podido ampliarse, lo que ha permitido la creación de un carril alternativo de acceso. Este esfuerzo conjunto resalta el compromiso de la comunidad para mantener el acceso al casco antiguo.

El alcalde Enrique Pueyo expresó su agradecimiento hacia los ingenieros de la Diputación Provincial de Huesca, así como hacia las empresas involucradas en la obra por su pronta respuesta ante esta situación. "También quiero reconocer el esfuerzo de Excavaciones ACB y de los vecinos que han permitido la cesión del terreno, lo cual ha sido fundamental para que los vehículos puedan acceder al centro histórico de Aínsa", señaló.

Sin embargo, Pueyo también reconoció la dificultad que esto representa para los residentes y los negocios de la villa, agradeciendo su paciencia mientras se llevan a cabo las obras. El alcalde confía en que los inconvenientes actuales valdrán la pena una vez finalizada la intervención.

Después de las festividades de Semana Santa, se estima que los trabajos continuarán durante aproximadamente dos meses más, con la intención de concluir con el asfaltado de la carretera y la inclusión de una acera que actualmente no existe.

Dicha obra, un compromiso por parte de la DPH, cuenta con un presupuesto de 260.000 euros. Los deslizamientos han impactado a varias viviendas en la parte baja del pueblo, lo que subraya la urgencia de las reparaciones.

“La situación era crítica y, aunque las obras estaban en fase de licitación cuando ocurrió el deslizamiento, se consideró esencial actuar de inmediato. Afortunadamente, no hemos tenido que lamentar heridos, y estamos muy satisfechos con la eficacia de los trabajadores. Gracias a su dedicación, podremos disfrutar de la circulación de vehículos durante la Semana Santa, un momento clave para dar inicio a la temporada turística en Aínsa”, concluyó el alcalde.