El portavoz de Agricultura del Partido Popular en las Cortes de Aragón, Ramón Celma, ha hecho un llamamiento directo al presidente del Gobierno autonómico, Javier Lambán, para que tome medidas urgentes a fin de solucionar con prontitud y eficacia los graves efectos que ha generado la sequía en el sector agropecuario y otros, como el energético.

Celma, que ha realizado estas manifestaciones durante una rueda de prensa, ha afirmado que una gran cantidad de ayuntamientos y comunidades autónomas ya han empezado a tomar medidas antes dicha circunstancia, y ha aseverado que es inimaginable afrontar la situación actual con las medidas que ha adoptado el gobierno autonómico y el central, ya sea por acción u omisión; en referencia al último Plan Hidrológico de la Demarcación del Ebro, del que se eliminaron 30 proyectos de embalses profundamente útiles y que también afectó a los proyectos de puesta en riego de 150,000 hectáreas.

Celma ha pedido a Lambán que tome medidas lo antes posible ante la sequía actual y, si bien no se ve capaz de hacerlo, necesita solicitar ayuda al principal partido de la oposición y al sector afectado, pero en ningún caso, debe quedarse sin hacer nada. El Partido Popular ha propuesto determinadas medidas, por ejemplo, la concesión de créditos blandos para que los agricultores puedan sembrar con mayor facilidad y que se otorguen ayudas directas a los afectados, además de su disposición para colaborar para superar esta crisis.

El diputado del PP ha hecho hincapié en que la situación es muy crítica, ya que la reserva de los embalses de la cuenca del Ebro apenas supera el 50 por ciento, lo que pone en peligro a la agricultura y al sector ganadero, al turismo y a la producción de energía, manifestando su preocupación por el impacto que este fenómeno climático está causando a la sociedad en general. Celma ha explicado que los daños en la producción de trigo duro, trigo blando y cebada de secano es irreversible, con pérdidas que oscilan entre el 60 y el 100 por ciento de las cosechas; mientras que, en el ámbito del regadío, la preocupación es enorme por las restricciones que se han anunciado para la campaña de riegos de verano que afectarán a la producción de cereales de invierno y reducirá la superficie cultivada de maíz, girasol y arroz.

El portavoz del PP también ha expresado su preocupación por el ganado ovino que no tendrá pastos que le permitan alimentarse y los ganaderos se verán obligados a comprar piensos y forrajes, lo que aumentará el costo de producción y, en consecuencia, los precios del producto cárnico. Además, ha recordado que la central hidroeléctrica de El Grado dejará de funcionar temporalmente debido a las bajas reservas de los pantanos de Mediano y El Grado II.