**ZARAGOZA, 18 de diciembre.** La diputada de Vox en las Cortes de Aragón, Carmen Rouco, ha planteado una firme postura en contra de la inmigración ilegal, exigiendo la expulsión de aquellos que ingresan al país de manera ilícita. Además, ha dejado claro su rechazo a la revocación de las licencias de operación a los hoteles que participan en programas de acogida de inmigrantes.

Rouco realizó estas declaraciones durante una reciente rueda de prensa, donde criticó la decisión del Gobierno de Aragón de cancelar la licencia de cuatro hoteles. Esta medida, que califica de errónea, fue una respuesta a las declaraciones del delegado del Gobierno en la región, Fernando Beltrán, quien insinuó que Vox también había considerado revocar dichas licencias. La diputada subrayó que su partido nunca ha planteado tal acción y que su enfoque va más allá de soluciones temporales.

En un tono directo, la parlamentaria cuestionó: "¿Por qué no se revoca la licencia a quienes han entrado en el país ilegalmente en lugar de castigar a los hoteleros?" Según Rouco, la lógica y las leyes existentes deberían dictar que quienes infringen la ley sean retornados a su país de origen, argumentando que la inmigración debe desarrollarse de manera legal y ordenada.

Rouco ha calificado de "cruel" la postura del Gobierno de Aragón, que, según ella, empuja a los empresarios hoteleros a cargar con las consecuencias de políticas fallidas que favorecen la inmigración ilegal. Afirmó que estas decisiones son un reflejo del cinismo del Gobierno de Jorge Azcón desde 2023, poniendo en riesgo la sostenibilidad de los negocios locales.

Durante la conferencia sectorial de julio de 2024, la consejera de Bienestar Social, Carmen Susín, tuvo la oportunidad de rechazar la inmigración ilegal, pero optó por votar a favor de medidas que, según Rouco, conducen a la inseguridad y al deterioro de los barrios aragoneses. La diputada también reprochó el hecho de que, mientras el Gobierno intenta buscar viviendas para nuevos inmigrantes ilegales, muchos jóvenes aragoneses se ven desplazados del mercado de la vivienda por precios inalcanzables.

La diputada expresó su indignación al afirmar que el Gobierno de Aragón, en colaboración con el PSOE, favorece a los inmigrantes que entran de forma irregular ante las necesidades de la población local. Según su criterio, es un acto despreciable que priorice a los inmigrantes ilegales sobre los ciudadanos españoles que están luchando por encontrar una vivienda adecuada.

Rouco rechazó la idea de que el Gobierno de Aragón pretenda culpar a los hoteleros por la situación, insistiendo en que el Partido Popular es quien ha alimentado el problema al no tomar medidas serias contra las mafias y las organizaciones no gubernamentales que se benefician de la crisis humanitaria.

La diputada también criticó al Gobierno por hacer un gesto simbólico al revocar las licencias, mientras, a su juicio, despilfarran recursos en ONGs involucradas en el tráfico humano. En su intervención, destacó que los hoteles La Pardina y Montearagón están gestionados por la entidad APIP-ACAM y deben ser protegidos.

En sus conclusiones, Rouco instó al Gobierno autonómico a seguir el ejemplo del presidente de la Comunidad Valenciana, Pérez Llorca, y suspender la financiación de organizaciones que, según ella, lucran de manera inhumana con el tráfico de personas. "De este modo, no habrá necesidad de atacar a los hoteles", aseguró.

Dirigiéndose directamente a Jorge Azcón y Manuel Balsco, la diputada de Vox hizo un llamado a permitir que los pequeños empresarios trabajen sin ser hostigados y a concentrarse en la deportación de inmigrantes ilegales, al tiempo que pidió aplicar con rigor la Ley de Extranjería. "Es hora de dejar de traicionar a Aragón y priorizar el bienestar de nuestros ciudadanos", concluyó.