TERUEL, 3 de diciembre.

Recientes esfuerzos de la Fundación Dinópolis en La Puebla de Valverde, un municipio de Teruel, han dado lugar a importantes descubrimientos paleontológicos, incluyendo fósiles de gacelas, caballos, ciervos y rinocerontes que datan de aproximadamente dos millones de años.

Este sitio, conocido como yacimiento 'La Puebla de Valverde', ha sido objeto de excavaciones sistemáticas desde 1963, llevadas a cabo por paleontólogos de diversas instituciones. A pesar de su rica historia, hace más de 25 años que no se realizaban excavaciones in situ, salvo una intervención en 2016 en sus alrededores, encomendadas por la Dirección General de Patrimonio Cultural.

La Fundación ha tomado la iniciativa de retomar las excavaciones en 2025 en este lugar, que fue declarado Bien de Interés Cultural en 2004. Desde la perspectiva geológica, el yacimiento pertenece a la Formación 'La Puebla', datándose en el Pleistoceno inferior, aproximadamente hace dos millones de años.

Eduardo Espílez, investigador de Dinópolis, ha compartido su entusiasmo por los progresos de la campaña de excavación en curso, que ya ha producido más de 200 fósiles. La conservación de los hallazgos es excepcional, presentando concentraciones de huesos en diversas capas del terreno, muchos de los cuales están bien preservados y organizados de acuerdo con la estratificación.

Entre los hallazgos más destacados se encuentran numerosos restos de Gazella borbónica, un antílope que muestra un gran número de cráneos y huesos de extremidades. Este pequeño mamífero, que mide aproximadamente 60 centímetros hasta la cruz, parece estar presente en cantidades significativas en el yacimiento, indicando la existencia de varios individuos de la especie.

Además de las gacelas, se han encontrado menos restos del caballo Equus stenonis, cuyas extremidades son los elementos más comunes encontrados, a menudo en articulaciones asociadas. Mediante comparación, este équido tenía un tamaño similar al de las cebras contemporáneas y un peso estimado entre 300 y 500 kg. La excavación también ha producido fósiles de cérvidos y de rinocerontes, incluyendo fémures y varias vértebras.

La investigadora Gema Siliceo de ARAID ha destacado que desde que comenzaron las excavaciones en 1963, se han documentado más de 20 taxones de mamíferos y tres tipos de aves en este yacimiento. Un hallazgo peculiar incluye fósiles de un primate cercopitécido denominado Paradolichopithecus, que guarda similitudes con los papiones y mandriles actuales.

La diversidad de carnívoros descubierta también es notable; entre los hallazgos se cuenta un feroz félido dientes de sable, un gigante guepardo y varias hienas de gran tamaño. El excepcional estado de conservación de los fósiles convierte a este yacimiento en uno de los más significativos para el estudio de la fauna de mamíferos de esa época.

Las especies más abundantes en el yacimiento son Gazella borbónica, siendo esta la ubicación en Europa con más restos de este antílope, y Equus stenonis, del cual se han recuperado una amplia variedad de elementos anatómicos. También se han identificado dos especies adicionales de bóvidos de mayor tamaño, ciervos gigantes y un rinoceronte, además de carnívoros como cánidos, hienidos, félidos y un úrsido.

Alberto Cobos, director e investigador de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis, subrayó que esta riqueza paleontológica resalta la importancia de continuar las excavaciones y colaborar con especialistas en la investigación de los hallazgos, que serán preservados en el Museo Aragonés de Paleontología en Teruel.

Esta iniciativa subraya el valor del yacimiento La Puebla de Valverde en el ámbito científico y su impacto socioeconómico en la provincia de Teruel. Asimismo, la Fundación ha querido rendir homenaje a Emiliano Aguirre, un renombrado paleontólogo fallecido en 2021, en el centenario de su nacimiento, quien contribuyó significativamente a las excavaciones de este yacimiento y apoyó la creación de Dinópolis desde sus inicios.