El edificio de Compromiso de Caspe 83, en el distrito de Las Fuentes en Zaragoza, ha sido ordenado a ser tapiado completamente por el Área de Urbanismo del Ayuntamiento después de haber sido ocupado ilegalmente y de haber sufrido un incendio el cual dejó a una mujer herida levemente por quemaduras y siendo trasladada al Hospital Miguel Servet. Además de tapiar la fachada en planta calle y el cerramiento de los accesos de la azotea, el Ayuntamiento de Zaragoza ha declarado que estudia la posible expropiación del inmueble debido al abandono por parte de su propietario, que en este caso es una entidad bancaria.

El consejero municipal de Urbanismo y Equipamientos del Ayuntamiento, Víctor Serrano ha declarado: "Es intolerable que grandes tenedores de vivienda o entidades bancarias tengan en este estado las edificaciones de las ciudades, permitiendo la okupación ilegal y vamos a actuar con la más absoluta firmeza”. A su vez, lamentó el marco legal actual que dificulta la intervención de los ayuntamientos en estos casos y ha pedido la colaboración de otras instituciones y la implementación de un marco legal que permita a los ayuntamientos actuar más fácilmente.

La propiedad del edificio, que se encuentra en estado de okupación ilegal, no puede ser inspeccionado por los técnicos municipales, lo cual llevó a pedir la autorización de acceso bajo el amparo judicial, ante el que estaba a la espera. Sin embargo, el pasado 19 de abril, los bomberos han tenido que actuar en este inmueble de seis alturas y dos sótanos ante un aviso de incendio en el mismo. Después de apagar el fuego, los técnicos de Urbanismo desplazados hasta el lugar pudieron entrar y comprobar que la caja de escalera no presentaba garantías para su uso en orden a la habitabilidad del inmueble, por lo que se ordenó el desalojo inmediato y el cierre del edificio.

La empresa encargada de las reparaciones va a proceder al tapiado completo de los accesos en azotea y la instalación de dos puertas antiokupas en la planta calle. El Ayuntamiento también ha declarado que se exigirá a la propiedad del inmueble que proceda a la reparación del mismo y que se incoará un procedimiento sancionador por omisión del deber de conservación del inmueble contra la propiedad. Además, se ha avanzado que si se da el caso de que el edificio sigue creando problemas a los vecinos o si la propiedad no se hace cargo de sus obligaciones, entonces se emprenderá el camino de la expropiación.