ZARAGOZA, 22 de diciembre. La economía de Aragón cerrará este año con un crecimiento del PIB del 2,9%, superando las expectativas iniciales. Este resultado, alineado con la media nacional, prevé un crecimiento del 2,5% para 2026, destacando un desempeño positivo en sectores como la industria y la construcción. Las grandes inversiones empresariales desempeñarán un papel crucial en la estabilización de la economía, ayudando a sobrellevar las dificultades actuales del sector automotriz y los impactos de la peste porcina.

Estas proyecciones se presentan en el informe sobre la situación económica y perspectivas para 2026, elaborado por CEOE Aragón y presentado en una rueda de prensa donde participaron el presidente saliente Miguel Marzo y Félix Longas, presidente de la Comisión de Coyuntura Económica. También estuvieron presentes líderes empresariales de la región, destacando la colaboración y el interés por fomentar un clima de inversión en la comunidad.

Marzo subrayó la importancia de las inversiones en infraestructura y tecnología, afirmando que la construcción de centros de datos impulsará el crecimiento del PIB en los próximos años. Según él, el optimismo es justificado, ya que a pesar de los retos, las condiciones preliminares muestran un panorama favorable para la economía aragonesa, que presenta niveles de inversión que superan la media nacional.

Aunque se expresaron estas notas de optimismo, la Confederación también adoptó un tono cauteloso ante las incertidumbres relacionadas con la transición del sector automovilístico hacia la electrificación y los efectos de la peste porcina en la economía agroalimentaria, que ya ha visto una reducción del 25% en los precios, afectando a su capacidad de recuperación.

Longas advirtió que la adaptación del sector del automóvil, de cara a un futuro más sostenible, puede generar una carga en las proyecciones de crecimiento, añadiendo la importancia de fomentar inversiones que tengan efectos colaterales positivos, especialmente en pequeñas y medianas empresas.

En relación a la industria automotriz, Benito Tessier destacó el nuevo marco regulador europeo que permitirá la continuidad de los motores de combustión más allá de 2035, lo que es positivo para España. Este contexto se produce en medio de un decrecimiento del 4% en el sector nacional respecto al año anterior, aunque los datos de producción siguen siendo robustos, con Aragón aportando unas cifras que superan los 310.000 vehículos fabricados en la planta de Stellantis.

A propósito de los desafíos globales, como las tensiones comerciales y los conflictos geopolíticos, Longas hizo hincapié en la necesidad de abordar la escasez de mano de obra cualificada en la región. Marzo añadió que la capacidad de Aragón para atraer y retener talento es un factor clave para sostener el crecimiento, especialmente considerando que el último año se han incorporado más trabajadores de los que han salido.

Asimismo, ambos líderes empresariales resaltaron los retos que plantea el absentismo laboral, un problema que afecta a varios sectores de la economía aragonesa. Marzo citó que, en 2024, 46.000 trabajadores no asistieron a sus puestos, lo que representa un costo significativo. Hicieron un llamado a mejorar la calidad del sistema de salud para enfrentar este desafío, que podría estar influenciado por el manejo ineficaz de los tiempos y recursos de atención médica.

La confederación aboga por la necesidad de que las mutuas puedan gestionar mejor los casos de absentismo y propusieron un análisis conjunto con el Gobierno de Aragón para identificar las causas subyacentes y buscar soluciones efectivas que aborden tanto la eficiencia de los trabajadores como la productividad de las empresas.

En el ámbito de la competitividad, Marzo enfatizó que la mejora del PIB no debe basarse únicamente en el incremento del empleo, sino en la necesidad de inversión en innovación y tecnología. La escasez de recursos eléctricos, que está limitando nuevas inversiones, también fue reconocida como un obstáculo para el desarrollo económico en la región, afectando la capacidad de crecimiento a largo plazo.

Por último, sobre la relación entre la política y la economía, el dirigente de CEOE Aragón consideró que la estabilidad política es vital, pero también lo es contar con unos presupuestos claros que permitan una planificación efectiva. El adelanto electoral, aunque puede generar incertidumbre, no debería perjudicar en gran medida el entorno empresarial, y se espera que sea un paso hacia una gestión más efectiva de los recursos en la comunidad.