El Ayuntamiento de Zaragoza ha decidido emprender un importante análisis sobre la viabilidad de ampliar la actual Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de La Cartuja. Con un presupuesto de 450.000 euros, este estudio servirá para definir si se opta por la ampliación de la instalación actual, cuyo monto se estima en 90 millones de euros, o por la construcción de una nueva, lo que elevaría el coste a 170 millones de euros. Además, la administración local está buscando el apoyo financiero del Gobierno de España para llevar a cabo este proyecto crucial.

El objetivo de esta evaluación es garantizar que el sistema de depuración de aguas se ajuste a la nueva Directiva europea sobre el tratamiento de aguas residuales urbanas, la cual requiere que para el año 2039 se cumplan rigurosos estándares en la eliminación de nutrientes como el nitrógeno y el fósforo, así como de microcontaminantes. Este cambio llega en un momento en el que la presión sobre los recursos hídricos y la protección del medio ambiente son más relevantes que nunca.

Víctor Serrano, consejero municipal de Urbanismo, ha indicado que se están utilizando estudios previos realizados por Ecociudad, que presentan diversas opciones para modernizar este proceso. Serrano se ha mostrado optimista, afirmando que estos estudios preliminares son una base sólida para asegurar que la ejecución de una nueva depuradora en Zaragoza sea considerada de interés general por el Estado, lo que sería esencial para contar con el apoyo financiero necesario.

El informe en el que se invertirá esta cantidad se dividirá en tres fases. La primera consistirá en un diagnóstico completo del estado actual; la segunda comparará las diferentes alternativas para encontrar la que mejor se adecue a las necesidades de Zaragoza; y la tercera fase se enfocará en la elaboración del anteproyecto para la opción seleccionada, lo que podría extenderse hasta finales de 2026 o principios de 2027.

Durante una reciente rueda de prensa, Serrano enfatizó la necesidad de que el Gobierno central declare esta nueva infraestructura como de interés general, y reiteró que para que esto suceda, es crucial contar con el apoyo financiero del Estado. Resaltó que, aunque aún no se conoce el porcentaje de ayuda que se podría recibir, es vital que el Ayuntamiento reciba noticias concretas sobre el futuro de esta obra.

El concejal también destacó que en otras ciudades, la ayuda del Gobierno ha llegado a oscilar entre el 40 y el 50 por ciento, e incluso hay ejemplos de financiamiento total en ciertas ocasiones. Sin embargo, Zaragoza ha estado históricamente en una situación particular, ya que los gastos de la depuradora actual han recaído completamente sobre los ciudadanos. Esto se debe a que la depuración es vista como una responsabilidad nacional en el cumplimiento de objetivos medioambientales.

Serrano recordó que desde hace casi dos años, la alcaldesa Natalia Chueca se ha reunido con representantes del Ministerio de Transición Ecológica para solicitar apoyo en la construcción de esta nueva instalación, al igual que se ha hecho en otros sistemas de depuración. “No podemos tolerar que el Gobierno ignore las necesidades de Zaragoza mientras invierte recursos en otros lugares”, afirmó.

El consejero también manifestó su preocupación por la falta de respuesta del Gobierno, tras la reunión que tuvo lugar el 9 de mayo de 2024. Criticó que la ciudad no debería ser la única en asumir el coste total de la nueva depuradora, mientras recibe un silencio por parte de las instituciones centrales. Serrano hizo hincapié en que no se puede seguir con este desinterés, especialmente al comparar la situación de Zaragoza con las subvenciones que reciben otros lugares, como Guipúzcoa y Barcelona, para proyectos menos urgentes.

Al terminar su intervención, Serrano reiteró que es inaceptable que a día de hoy Zaragoza siga sin garantías sobre la ayuda del Gobierno para su depuradora, y subrayó el compromiso del Ayuntamiento para cumplir con todos los requisitos para tener la mejor depuradora posible para 2039, subrayando que es injusto el trato que su ciudad está recibiendo en este contexto.