Zaragoza albergará una biorrefinería líder en Europa que procesará 15.000 toneladas de residuos al año
La ciudad de Zaragoza ha sido testigo de un hito histórico con la puesta en marcha de la primera biorrefinería urbana de Europa, con una inversión significativa de 23 millones de euros en los últimos tres años. Este proyecto, denominado 'Circular Biocarbon', tiene como objetivo gestionar entre 10.000 y 15.000 toneladas de residuos domésticos al año, en un esfuerzo por valorizar estos desechos y convertirlos en productos innovadores.
La empresa Urbaser lidera este consorcio formado por 11 entidades, que ha destinado una considerable cantidad de recursos para el desarrollo de esta iniciativa pionera. El enfoque del proyecto es transformar la fracción orgánica de los residuos sólidos urbanos, junto con los lodos de depuración de aguas residuales, en una variedad de productos útiles para la industria y los consumidores finales.
Desde recubrimientos para productos de consumo directo hasta abono organomineral sólido con propiedades bioestimulantes, la biorrefinería 'Circular Biocarbon' promete ofrecer una gama diversa de productos derivados de los residuos orgánicos. La implementación de este proyecto en dos ubicaciones diferentes demuestra su versatilidad y potencial de replicabilidad en toda Europa.
Para garantizar el éxito de este proyecto innovador, es fundamental que los ciudadanos se comprometan a separar correctamente los residuos orgánicos. Con una capacidad de procesamiento gradual de hasta 15.000 toneladas al año, la biorrefinería busca probar su eficacia en diferentes contextos y sistemas de gestión de residuos.
La puesta en marcha de esta biorrefinería en Zaragoza es un paso significativo en el marco del Plan de Acción para la Economía Circular de la Unión Europea. Este proyecto contribuirá a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de los vertederos, al mismo tiempo que fomentará la reutilización y el reciclaje de residuos de alta calidad en las ciudades europeas.
La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha destacado el papel destacado que la ciudad juega en la economía circular, liderando la transformación hacia ciudades sostenibles en Europa. Con beneficios medioambientales y económicos, la biorrefinería promete reducir la cantidad de residuos enviados a vertederos y contribuir a la generación de empleo y riqueza en la región.
Desde la compañía Urbaser, se enfatiza la importancia de este proyecto para el desarrollo de una bioeconomía circular en Europa. El CEO, Fernando Abril-Martorell, resalta el enfoque innovador y la transición hacia la producción de materiales basados en la biotecnología, con el objetivo de reducir la dependencia de recursos no renovables.
Con la creación de productos finales comercializables y la generación de empleo local, la biorrefinería de Zaragoza se posiciona como una instalación revolucionaria que establecerá un nuevo estándar europeo de circularidad. Este proyecto no solo impulsará el crecimiento ecológico, sino que también contribuirá al ahorro de recursos regionales y a la creación de una economía sostenible y saludable.