ZARAGOZA, 4 de noviembre. El próximo III Congreso Interdisciplinar sobre Despoblación se llevará a cabo en la capital aragonesa del 5 al 7 de noviembre, congregando a más de 80 expertos, incluyendo por primera vez a investigadores internacionales de renombre. Este encuentro no solo abordará la despoblación desde un enfoque demográfico, sino que también se centrará en el bienestar de quienes eligen residir en áreas rurales.

Este congreso, que ha tenido ediciones anteriores en Ciudad Real en 2022 y en Valencia en 2023, cuenta con la organización de la Cátedra DPZ sobre Despoblación y Creatividad, junto a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza y el Centro de Estudios sobre Despoblación y Desarrollo de Áreas Rurales (Ceddar). La actividad recibe respaldo de la Diputación Provincial de Zaragoza y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

El propósito del congreso es fomentar un debate dinámico y pertinente que impulse la investigación y ayude a diseñar estrategias efectivas, orientadas a los responsables políticos y a la ciudadanía en general.

Durante la presentación del evento, que tuvo lugar este martes en la DPZ, participaron el diputado Eduardo Arilla, el director de la Cátedra Vicente Pinilla y los miembros del comité organizador, Mari Luz Hernández y Luis Antonio Sáez. Arilla destacó que este congreso es “el mayor que se realiza en España sobre despoblación”, y resaltó a la Universidad de Zaragoza como un modelo a seguir para otras instituciones educativas del país.

El congreso no solo es el evento de mayor relevancia en España en este ámbito, sino que también se considera “el único” en el mundo que se enfoca en la despoblación. Se presentarán más de 80 trabajos académicos que se discutirán en diversas mesas redondas, abordando el fenómeno desde múltiples disciplinas como la geografía, sociología, antropología, historia y economía.

Entre los participantes del congreso se encuentran figuras destacadas como Mike Andrews, director de la Unidad de Políticas de Población del Gobierno de Escocia, el profesor Michael Butch de la Universidad de Aberystwyth y Hilma Salonen de Nordregio, un instituto de desarrollo regional en Escandinavia. También se llevará a cabo una mesa redonda con representantes de Cámaras de Cuentas autonómicas que han analizado las políticas de despoblación.

La elección de Zaragoza como sede se debe al trabajo interdisciplinario que ha venido desarrollando la Universidad de Zaragoza, lo que fue considerado "interesante" por los coordinadores del evento, según explicó Mari Luz Hernández.

Los trabajos presentados se agruparán en 17 sesiones temáticas que incluirán aspectos como medios de comunicación, demografía, desarrollo local, educación y salud, entre otros. Esta amplia gama de temas refleja la complejidad de la despoblación y la necesidad de abordar sus múltiples facetas.

Luis Antonio Sáez, director del Ceddar, aseguró que la despoblación es un tema propicio para el diálogo y la reflexión en diversas direcciones, crítica a que las decisiones políticas no siempre consideren adecuadamente esta cuestión.

Vicente Pinilla agregó que la agenda de este congreso implica un cambio de enfoque, al prioritizar el bienestar de las personas sobre las cifras de población. “Hemos pasado de preocuparnos solo por el número de habitantes a buscar condiciones favorables para que las personas puedan elegir residir en el medio rural”, subrayó.

Sáez añadió que en los últimos años se ha fomentado la interdisciplinariedad en el análisis de la despoblación, incluyendo ámbitos como el periodismo y la sanidad, y destacó la importancia de las comparaciones internacionales que brindarán los expertos escoceses y galeses presentes en el congreso.

En este sentido, se ha hecho hincapié en la necesidad de elaborar políticas adaptativas que sean más realistas frente a la inevitable despoblación. Se mencionó el concepto de “decrecimiento urbano” que ya se discute en otros países y que empieza a ser relevante en ciudades españolas intermedias.

Pinilla destacó la experiencia de Escocia, donde, a pesar de la ausencia de competencias en migración, se están diseñando estrategias que facilitan la integración de inmigrantes. Esta comparación resalta la falta de un discurso civilizado sobre la inmigración en España, lo que limita la formulación de políticas efectivas en este ámbito.

Por último, el diputado Eduardo Arilla enfatizó que “la despoblación se combate con calidad de vida”, advirtiendo que es crucial que las políticas promovidas por las administraciones complementen los esfuerzos locales y no obstruyan el desarrollo de iniciativas que beneficien a la población joven y cualificada que elige vivir en el entorno rural.