El pasado domingo, Zaragoza dio la bienvenida a un grupo de 20 menores que forman parte del sistema de protección internacional, provenientes de las Islas Canarias. Esta acción se enmarca en la decisión del Tribunal Supremo que ha ordenado la redistribución de estos jóvenes a lo largo de la península ibérica.

Estos adolescentes, de aproximadamente 17 años, en su mayoría de origen maliense y somalí, han mostrado su satisfacción ante esta nueva etapa de sus vidas. Según declaraciones de la Delegación del Gobierno en Aragón, estos jóvenes llegan con sueños y metas, como cualquier adolescente de su edad.

Durante una visita del delegado del Gobierno, Fernando Beltrán, a estos menores, se les pudo escuchar expresar sus aspiraciones. Algunos desean convertirse en médicos, otros en futbolistas, y algunos aspiran a ser educadores. Beltrán enfatizó que estos jóvenes son como hijos para la sociedad española, a pesar de las diferencias culturales.

El delegado del Gobierno compartió esta noticia en una entrevista con la cadena SER, donde resaltó que estos solicitantes de asilo están llegando en pequeños grupos al territorio peninsular.

Beltrán subrayó que estos menores han escapado de situaciones difíciles, viviendo en países afectados por conflictos bélicos y severas violaciones de derechos humanos, así como una peligrosa radicalización. A pesar del largo y arriesgado viaje que realizaron para llegar a las costas canarias, se presentaron con sonrisas amplias y un espíritu esperanzador.