HUESCA, 28 de noviembre.

El retorno a los hogares de más de 200 residentes de la plaza de Santa Clara en Huesca no será posible en el corto plazo, según ha informado la alcaldesa Lorena Orduna. Esta declaración se produjo tras la inauguración de una reunión del Centro de Coordinación Operativa Municipal (CECOPAL), que está en funcionamiento para gestionar la situación de emergencia que se ha declarado de nivel 1.

Las evaluaciones llevadas a cabo por el Ayuntamiento han confirmado la existencia de daños significativos en las estructuras de los edificios. Ahora, se requiere un análisis más detallado y la búsqueda de soluciones técnicas adecuadas. Mientras se desarrollan estas gestiones, los vecinos han pasado su primera noche fuera de sus residencias, accediendo en grupos controlados para recogidas esenciales de pertenencias.

Durante el fin de semana, se han establecido horarios específicos para que los inquilinos de los portales 1 y 2 puedan regresar y recoger sus enseres, de 10:00 a 12:00 y de 16:00 a 18:00 horas. Los residentes de los portales 3 y 4 tendrán acceso de 12:00 a 14:00 y de 18:00 a 20:00 horas. Se ha instado a los afectados a que eviten el transporte de objetos voluminosos.

El Ayuntamiento mantiene un puesto de mando en la Plaza de Santa Clara donde se controla el acceso de vecinos a sus viviendas. La alcaldesa, Orduna, subrayó la importancia de no actuar de manera independiente: “Nadie puede hacerlo por su cuenta”, asegurando que el área se encuentra segura y acordonada. A lo largo de la mañana, las personas afectadas están siendo convocadas de manera ordenada según sus edificios.

La edil de Huesca ha remarcado que es crucial actuar con precaución y ha confirmado que, por el momento, los residentes no podrán regresar a sus hogares. “La decisión de evacuarlos era indiscutible, tras consultar con nuestros técnicos y la empresa especializada en estructuras que hemos contratado, quedó claro que no era seguro permanecer en esos edificios”, enfatizó.

Los damnificados, que se encuentran en una situación complicada, tuvieron que abandonar sus casas rápidamente, sin tiempo para recuperar sus pertenencias. Mientras que algunos han sido alojados en hoteles, otros han optado por permanecer en segundas residencias o en casas de amigos y familiares, incluyendo a un grupo de 20 menores.

La situación es preocupante y se están buscando alternativas para reubicar a los afectados. Los Servicios Sociales están realizando entrevistas para comprender las necesidades de cada familia y mantener la cohesión familiar en la búsqueda de soluciones habitacionales. Orduna ha destacado que la solidaridad en Huesca ha florecido, con muchos vecinos ofreciendo alojamiento a través de redes sociales, y el Ayuntamiento está trabajando para canalizar esa ayuda de manera efectiva.

Los perfiles de los afectados son diversos y reflejan la tragedia que viven; hay desde familias con niños hasta personas mayores y estudiantes, todos con realidades distintas. La jornada del jueves fue de intensa actividad, con los servicios de atención psicológica y social dedicándose a atender a aquellos que enfrentan esta crisis. El número habilitado por el Ayuntamiento para atender a los afectados se ha visto desbordado debido a la alta demanda.

No solo los residentes han sufrido, sino que también comercios y empresas han resultado perjudicados. Se les están ofreciendo alternativas para continuar con su actividad en otros locales de la ciudad. "Ya hemos empezado a trasladar a las empresas y les hemos propuesto diferentes opciones, incluyendo la posibilidad de mudarse a Walqa", indicó Orduna.

El Ayuntamiento ha activado el nivel 1 de emergencia y mantiene el CECOPAL en funcionamiento, enfocando esfuerzos tanto en la asistencia social a los afectados como en la evaluación técnica de la situación. Se ha contratado a una empresa especializada para llevar a cabo un estudio exhaustivo de los daños y determinar las acciones a seguir.

Según los informes de la alcaldía, los bloques 2 y 4 son los más comprometidos. El bloque 1 presenta menos daños y podría ser uno de los primeros en permitir el retorno de sus habitantes, pero Orduna aclaró que se habla con cautela.

Asimismo, en los edificios más perjudicados se han instalado dispositivos de monitoreo que, por el momento, no han registrado ninguna alarma.

Las festividades navideñas también se verán afectadas, ya que el encendido de luces planificado para este sábado ha sido pospuesto como un gesto de respeto hacia los afectados, al igual que otros eventos programados.

La zona permanece bajo vigilancia y el tráfico ha sido restringido, lo que ha llevado a realizar ajustes en la circulación en las calles cercanas.