Crónica Aragón.

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La revitalización del Huerva restablece la dignidad de su cauce urbano en Zaragoza.

La revitalización del Huerva restablece la dignidad de su cauce urbano en Zaragoza.

ZARAGOZA, 6 de diciembre. La recuperación del río Huerva en Zaragoza se presenta como un esfuerzo significativo para restaurar la dignidad de un cauce que ha padecido deterioro a lo largo del tiempo. Este proyecto aportará un nuevo respiro a la comunidad al permitir a los vecinos acceder y disfrutar de esta arteria que cruza el corazón de la ciudad, transformándola en un espacio propicio para diversas actividades.

El objetivo principal de esta iniciativa es revitalizar este corredor natural, conectándolo de manera armónica con la urbe. Se busca transformar estas áreas afectadas en entornos de calidad ambiental superior, que fomenten la apreciación de la biodiversidad y mejoren el bienestar de sus habitantes.

Las obras se ejecutarán en dos secciones del río abarcando un total de 2,5 kilómetros, con un horizonte de ejecución de 15 y 8 meses para cada una. La finalización está prevista para el verano de 2026. El primer tramo tiene un presupuesto estimado de 8,85 millones de euros, mientras que el segundo superará los 23 millones.

Este ambicioso proyecto cuenta con el respaldo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, gracias a dos convocatorias enmarcadas dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. La Unión Europea, a través de NextGenerationEU, aporta cerca de 5 millones de euros, y el Gobierno de Aragón se ha comprometido con 20 millones en colaboración con el Ayuntamiento de Zaragoza, que contribuirá con 7 millones adicionales.

El primer tramo se extiende desde el puente de Blasco del Cacho hasta la Gran Vía, cubriendo 1,2 kilómetros, con una inversión de 16 millones de euros y un tiempo estimado de 15 meses. Al mismo tiempo, se trabaja en otro tramo que va desde la calle Miguel Servet hasta la desembocadura en el Ebro, abarcando 1,3 kilómetros y con un presupuesto de 8 millones de euros y 8 meses de ejecución.

Las obras se desarrollarán en dos fases. La primera comenzará en noviembre de 2024 e incluirá actividades de limpieza en el río, como la eliminación de escombros, la limpieza de especies invasoras y la retirada de estructuras antiguas que dificultan los accesos.

Esta primera etapa también incluirá la creación de caminos peatonales y un sistema de recolección de aguas pluviales bajo el nuevo parque que se desarrollará cerca de la calle Marina Española, así como la renovación de las tuberías de saneamiento en las cercanías.

En la segunda fase, que se enfocará en el área del Camino de las Torres, se renovará un gran colector y se ampliará el cauce del río, aumentando la capacidad de desagüe para minimizar riesgos durante las inundaciones. Esta fase representa una inversión de 8,4 millones de euros, respaldada por el Ayuntamiento de Zaragoza y otras instituciones.

La segunda fase se ejecutará a partir de septiembre de 2025 y conllevará un plazo de ejecución de 15 y 8 meses, habiendo sido adjudicada a un consorcio especializado en la materia.

Este proyecto incluye la plantación de más de 160,000 árboles y plantas, además de la creación de ocho nuevos parques a lo largo del recorrido urbano del río. En particular, se planea una pasarela peatonal de 25 metros entre las calles Viva España y Manuel Lasala, con accesos adaptados para un mejor tránsito.

Se implementarán taludes verdes, graderíos y rampas usando un innovador sistema que combina madera con vegetación, promoviendo así una mejor integración ecológica. Asimismo, se establecerán pequeños parques en diversas ubicaciones estratégicas a lo largo del recorrido.

En respuesta a las solicitudes vecinales, se mejorarán seis calles colindantes, implementando un enfoque que prioriza la seguridad peatonal y la vegetación en las aceras. El objetivo es garantizar un entorno más pacífico y accesible para todos.

En el segundo tramo del proyecto, que va desde Miguel Servet hasta la desembocadura en el Ebro, se facilitará la mejora de los caminos y la eliminación de obstáculos en el cauce de agua, así como la renovación de la red de riego y la iluminación en la zona.

La accesibilidad es una prioridad en esta regeneración, ya que se busca eliminar barreras para las personas con movilidad reducida. Se contempla la implementación de senderos accesibles que conecten el río con la ciudad, potenciando la interacción de los ciudadanos con el entorno natural.

El concejal de Urbanismo de Zaragoza, Víctor Serrano, ha destacado la importancia de este proyecto, considerándolo una infraestructura verde de gran relevancia no solo para la ciudad, sino como un referente a nivel europeo. Se espera que este esfuerzo transforme la relación de los zaragozanos con el río, convirtiéndolo en un lugar de disfrute y esparcimiento.

La consejera de Movilidad y Medio Ambiente, Tatiana Gaudes, ha subrayado la dimensión de concienciación ambiental que también acompaña a este ambicioso proyecto, haciendo hincapié en que las áreas verdes deben ser accesibles y cuidar la calidad de vida de todos los ciudadanos, quienes son en última instancia los verdaderos propietarios de estos espacios.