En un avance significativo en la lucha contra el vandalismo, la Policía Nacional ha conseguido liberar de un importante atraco en el cementerio de Torrero, tras la detención de tres individuos sospechosos de estar detrás de más de 500 robos en este sagrado lugar. Sin embargo, tras declarar ante el Juzgado de Instrucción, los detenidos han recuperado su libertad.

Este operativo, llevado a cabo el viernes, fue parte de una investigación que se inició a finales de septiembre, cuando se comenzaron a reportar una serie de robos de objetos de metal del cementerio. Durante este periodo, se han recuperado más de una tonelada de valiosos elementos ornamentales de bronce, latón, plata y cobre que estaban destinados a ser fundidos.

Las autoridades recibieron la primera denuncia de estos robos durante las celebraciones de las Fiestas del Pilar, y desde entonces, el número de denuncias no ha dejado de aumentar. Este goteo de información ha permitido a la Policía identificar rápidamente a los sospechosos y llevar a cabo la operación que culminó en sus detenciones.

Los ladrones operaban en las horas nocturnas, sustrayendo meticulosamente cruces, placas, jarrones y esculturas de nichos y lápidas, para luego transportarlos en una furgoneta hacia su destino final: el mercado del metal. Este modus operandi ha puesto de relieve la necesidad de vigilar más de cerca estos lugares que, por su naturaleza, deberían ser sagrados y protegidos.

Afortunadamente, gracias a la diligencia y profesionalismo de los agentes, todos los objetos robados han sido recuperados antes de que pudieran ser fundidos y perderse para siempre. En los próximos días, la Policía Nacional planea realizar una exposición pública de los objetos, que permitirá a los legítimos propietarios reclamar sus pertenencias tras el inventario y clasificación de los mismos.