Buj acusa a la ministra Saiz de establecer una frontera económica con el concierto catalán.
En un tono enérgico y crítico, la portavoz de Despoblación del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, Emma Buj, ha denunciado que el concierto catalán acordado por el Gobierno central con los nacionalistas está creando una división económica artificial en España.
Durante la sesión de control al Ejecutivo en el Senado, Buj confrontó a la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, señalando que este acuerdo perjudica especialmente a las zonas despobladas del país, como Teruel, su provincia de origen.
La senadora del PP criticó duramente a la ministra portavoz, Pilar Alegría, por respaldar las concesiones realizadas a Cataluña y compararlas de manera despectiva con las ayudas destinadas a las empresas de Teruel, Soria y Cuenca.
Buj subrayó que estas ayudas no son un privilegio, sino una medida necesaria para combatir la despoblación en esas provincias, y acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de priorizar sus intereses políticos sobre el bienestar de toda la nación.
La senadora del Partido Popular instó a la ministra Elma Saiz a aclarar cuál será la próxima acción controvertida del presidente Sánchez, destacando que la falta de coherencia y la búsqueda de apoyo político están dañando la igualdad y solidaridad entre los españoles.
En un tono incisivo, Buj acusó a Sánchez de utilizar las instituciones estatales en beneficio propio y de desatender las necesidades fundamentales de la población, como la sanidad y la educación, con tal de mantenerse en el poder.
La senadora también cuestionó la actuación de Pilar Alegría, afirmando que como aragonesa debería haber abogado por un aumento significativo en las ayudas a las empresas de Teruel, Soria y Cuenca, mostrando su desacuerdo con la falta de defensa de esos intereses.
Finalmente, Buj retó a la ministra Saiz a visitar Aragón y explicar personalmente las decisiones tomadas por el Gobierno, así como a reconocer la realidad sobre el régimen de Maduro en Venezuela, en un gesto de confrontación directa con las políticas del Ejecutivo de Sánchez.