Los habitantes de Azuara, una localidad de Zaragoza, se están movilizando desde muy temprano este domingo para restaurar el orden tras el desastre causado por el tren de tormentas del pasado viernes. A este desastroso panorama, se le suma la intensa lluvia caída el sábado, que agregó otros 35 litros a la ya inexcusable situación de barro y desperfectos en la zona.

En un ambiente de colaboración y esfuerzo colectivo, se pueden ver a los vecinos trabajando en la recolección de escombros y material dañado, mientras la directora gerente del Servicio Aragonés de Salud, Ana Castillo, junto a la responsable de Atención Primaria, Pilar Borraz, han inspeccionado el centro de salud de Azuara, que ha quedado gravemente afectado.

Las imágenes y vídeos del desastre no logran captar la magnitud de lo que han visto. Sin embargo, Castillo ha afirmado que se garantizará la atención sanitaria en Azuara, al menos temporalmente. Actualmente, se ha habilitado un punto de atención de urgencias en un garaje proporcionado por el Ayuntamiento, aunque se prevé que muy pronto se instale un centro de salud temporal con las instalaciones necesarias mientras se evalúan los daños y se decide la ubicación definitiva.

“Todo está en óptimas condiciones para ofrecer atención médica”, subrayó Castillo, quien también expresó su agradecimiento a la abrumadora respuesta de la comunidad, destacando el papel del alcalde Joaquín Alconchel y el compromiso del personal médico, que arriesgó su seguridad el viernes para atender a los afectados.

En la jornada de hoy, la atención médica ha estado a cargo de la doctora del 061 Naiara Laserna, junto con la enfermera Sandra Leal y el técnico de emergencias Marius Podina. Desde las 12:30h, ya se habían atendido cerca de veinte incidentes menores, como cortes y traumatismos, típicos entre quienes se dedican a la limpieza tras un desastre natural.

“Si los vecinos de Azuara necesitan trasladarse a Muniesa, lo pueden hacer, y en todo momento hemos organizado el acceso de ambulancias a todos los pueblos por las rutas más cortas, garantizando tiempos de respuesta adecuados para la atención sanitaria”, explicó Castillo.

Varios locales están siendo considerados, junto al alcalde, para albergar temporalmente el centro de salud. “Es esencial que técnicos de arquitectura e ingeniería supervisen la opción que elijamos para asegurar la calidad y seguridad de la atención”, añadió.

El alcalde Alconchel, satisfecho con la respuesta de la comunidad, los Bomberos, la Guardia Civil y Protección Civil, se mostró firme en que la situación debe resolverse lo antes posible. “Con esta colaboración, confiamos en que pronto estaremos en condiciones de reanudar la vida cotidiana”, declaró.

Alconchel enfatizó la importancia de mantener el centro de salud en Azuara, reiterando su compromiso al ofrecer un local de su asociación, la 'Peña de los Apóstoles', asegurando que cumplirá todas las normativas necesarias. “El Ayuntamiento está aquí para hacer lo que sea. Comuníquenle al consejero que necesitamos resolver esto en siete días. Estamos preparados para actuar, con su ayuda”, concluyó.

Este sábado, una ambulancia SVA del 061 estuvo operativa casi toda la mañana en Azuara, atendiendo las necesidades médicas de la población. Naiara Laserna, coordinadora del Grupo de Múltiples Víctimas y Catástrofes, explicó que inicialmente el personal está priorizando la atención de aquellos que participan en las labores de desescombro, sin olvidar a los ciudadanos mayores que puedan requerir asistencia.

Dicha ambulancia contaba con un equipo médico, de enfermería y un técnico de emergencias, prestando atención en un puesto sanitario provisional establecido en un garaje local. Durante el resto del día, la ambulancia irá moviéndose según se necesite, pero un equipo de enfermería permanecerá en Azuara para seguir atendiendo cualquier requerimiento.

Ana Castillo, quien estuvo acompañada en su visita por Pilar Borraz, ya había estado en Azuara el día anterior para inspeccionar el devastado centro de salud. La visita también contó con la presencia de responsables sanitarios y técnicos de ingeniería para evaluar los daños. Juntos han recorrido las áreas afectadas para valorar el significativo esfuerzo de los servicios de emergencias y voluntarios que trabajan arduamente por restablecer la normalidad en la localidad.