En un paso significativo hacia la conservación de la fauna, Aragón se unirá al programa nacional destinado a la preservación del lince ibérico. La decisión fue comunicada tras una reunión celebrada recientemente en el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, donde se aprobó la recepción de ocho individuos: cuatro machos y cuatro hembras, provenientes de un exitoso programa de cría en cautividad. Estos lince se reintroducirán en la cuenca del río Huerva, dentro de la provincia de Zaragoza.
Este movimiento marca la primera reintroducción del lince ibérico en el Valle del Ebro y en toda la región nordeste de la península, un hecho destacado por el Gobierno aragonés. La decisión se fundamenta en un proceso participativo que ha demostrado un respaldo unánime por parte de los 16 municipios que componen la cuenca, lo que destaca la importancia de la colaboración local en iniciativas de conservación.
Las liberaciones inaugural de estos felinos están previstas para llevarse a cabo en el primer trimestre de 2026, comenzando desde la finca Acampo Armijo, ubicada en el término municipal de Zaragoza. Este ambicioso proyecto buscará impactar positivamente en los municipios de la cuenca del Huerva, incluyendo localidades como Jaulín y Valmadrid, al introducir al lince como un depredador natural que ayudará a regular la población de conejos en la zona.
La elección de la cuenca del Huerva como sitio de reintroducción se basó en criterios de viabilidad de hábitat, establecidos en el Protocolo de selección del lince ibérico y respaldado por el proyecto LIFE Lynxconnect. Este protocolo se enfoca en la disponibilidad de hábitat adecuado y una notable densidad de conejos, la principal fuente de alimento para el lince, gracias al esfuerzo conjunto de los Agentes de Protección de la Naturaleza y la financiación aportada por el Ministerio correspondiente.
El área destinada a la liberación se extiende por 27.500 hectáreas, y ha sido validada por el grupo de trabajo del lince por su riqueza ambiental, con el 70% del terreno formando parte de la Red Natura. Este espacio alberga valiosos ecosistemas, que incluyen matorrales de yesos y pinares estratégicamente situados en barrancos que ofrecen refugio adecuado para la especie.
En la región del Campo de Cariñena, la zona seleccionada también ofrece un paisaje diverso que incluye hoces fluviales del Huerva y formaciones arboladas de encinas y pinares. Este hábitat, junto con el cereal de secano y otros cultivos como olivos y almendros, ofrece un entorno enriquecedor para la reintroducción del lince ibérico, extinta en la región durante la segunda mitad del siglo XX.
La llegada de estos ocho ejemplares permitirá iniciar formalmente la creación de una nueva población de lince ibérico en Aragón, en línea con la estrategia nacional de conservación que busca establecer nuevas comunidades reproductoras a lo largo de la península. Este esfuerzo no solo busca preservar la especie, sino también impulsar el desarrollo económico y turístico de la región, dada la creciente relevancia de iniciativas de conservación.
El programa de reintroducción, que ha visto el crecimiento de la población de lince ibérico en España y Portugal, ha logrado un avance destacable, alcanzando un censo de 2.401 individuos en 2024. La experiencia acumulada desde 2011, con la reintroducción de más de 400 linces en diversas regiones adecuadas, es considerada un modelo de éxito en el ámbito de la conservación de especies amenazadas.
Además, se han incorporado entidades privadas dispuestas a apoyar financieramente el proyecto, como la Fundación SAMCA, que ha comprometido 200.000 euros en un convenio con el Gobierno aragonés para facilitar las labores de reintroducción. Esta colaboración refleja un compromiso amplio y plural en la defensa de la biodiversidad.
El Gobierno de Aragón y la empresa Sarga también están colaborando en un proyecto LIFE, conocido como 'Resilince', que busca mejorar el estado de conservación del lince en la mitad norte de España. Este esfuerzo incluye la creación de nuevas poblaciones y la mejora de hábitats a través de convenios con propietarios y comunidades de cazadores, quienes se involucrarán en la creación de puntos de agua y otras medidas que beneficien tanto al lince como a otras especies autóctonas.
Para facilitar la implementación del programa, se ha formalizado un acuerdo entre el Departamento de Medio Ambiente y Turismo y la sociedad Acampo Armijo. Este convenio establece las bases para la colaboración en la construcción y mantenimiento de cercados, seguimiento poblacional, mejora del hábitat y cuidado de los ejemplares en su adaptación. Además, se creará una comisión mixta para supervisar y evaluar el progreso del proyecto.
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.