El Gobierno de Aragón ha dado un paso importante hacia la protección de la salud pública en la región al firmar un convenio de colaboración para la implantación y desarrollo del Plan de Vigilancia y Respuesta de las Enfermedades Transmitidas por Vectores. Este plan, suscrito por el consejero de Sanidad, José Luis Bancalero Flores, la vicerrectora de Transferencia e Innovación Tecnológica de la Universidad de Zaragoza, Gloria Cuenca Bescós, y los investigadores Ignacio de Blas Giral e Ignacio Ruiz Arrondo, aborda enfermedades como la leishmaniosis, el dengue, el paludismo, la fiebre del Nilo occidental y la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo que están en aumento a nivel mundial.
La presencia de mosquitos, garrapatas y flebótomos en muchas regiones de España plantea un desafío en la lucha contra estas enfermedades transmitidas por vectores. El consejero de Sanidad señaló que factores como el comercio internacional, el cambio climático y los cambios sociodemográficos contribuyen a la expansión de estas patologías, lo que hace vital la implementación de este plan de vigilancia en Aragón.
El objetivo principal del plan es detectar precozmente estas enfermedades y responder rápidamente para prevenir la propagación de casos secundarios y brotes autóctonos en la región. Bancalero Flores destacó la importancia de abordar estas enfermedades que representan una amenaza real para Aragón y agradeció la colaboración de la Universidad de Zaragoza en este esfuerzo conjunto.
La vicerrectora de la Universidad de Zaragoza, Gloria Cuenca Bescós, expresó su satisfacción por trabajar en un tema tan relevante para la salud pública y resaltó la importancia de esta colaboración en un contexto de cambio climático que puede incrementar los riesgos de estas enfermedades. La directora general de Salud Pública, Nuria Gayán, subrayó la importancia de la colaboración técnica y la experiencia de la universidad para implementar el plan de manera eficaz.
El plan incluye la realización de cinco planes piloto para diseñar sistemas de prevención, vigilancia y control, así como un plan de respuesta ante casos o brotes de enfermedades vectoriales. La coordinación entre los diferentes servicios de salud y la universidad será clave para garantizar una respuesta efectiva ante posibles alertas sanitarias.
Esta colaboración entre el Departamento de Sanidad y la Universidad de Zaragoza se ha mostrado efectiva en la investigación y prevención de enfermedades vectoriales como el paludismo o el dengue, y con este convenio se ampliará la vigilancia y prevención en la región. El Gobierno de Aragón destinará una cantidad económica para la implementación de los objetivos previstos en el convenio, que estará en vigor hasta el 31 de diciembre de 2024, con posibilidad de prórroga.
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