ZARAGOZA, 22 de octubre. El representante de Vox en las Cortes de Aragón, Alejandro Nolasco, ha criticado enérgicamente al presidente regional, Jorge Azcón, por no haber presentado aún el presupuesto para el 2026. Según Nolasco, esta falta de acción se debe a la influencia del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien estaría detrás de las decisiones de Azcón, limitando su capacidad de llegar a un acuerdo con Vox.

En sus declaraciones, Nolasco señaló que la situación actual se debe a una "inestabilidad absoluta" provocada por la terquedad de Azcón, quien parece estar bajo la presión de no reconocer a Vox como un aliado válido. "Feijóo prefiere que no colaboremos para evitar el estigma de una alianza con la extrema derecha", aseguró el portavoz de Vox, quien considera que esto está impidiendo el avance de la región.

Nolasco también abordó el reciente despido de Marcos Francoy, un asesor del grupo parlamentario, que fue cesado tras controversial mensajes en redes sociales. Aseguró que Azcón tenía conocimiento de esta decisión pero optó por actuar primero, lo que Nolasco calificó de "mezquino" al querer aparentar que Vox había cedido a las presiones externas.

Refiriéndose a la naturaleza del despido, Nolasco insistió en que Francoy no ocupaba un cargo electo y su salida no era repentina, lo que pone de relieve la falta de ética política por parte del Gobierno aragonés. Criticó el comportamiento del PP, definiéndolo como "un maltrato y acoso sin precedentes en la política aragonesa".

En cuanto a la relación con el PP, Nolasco aclaró que dentro de Vox no existen divisiones como en otras formaciones, y que las decisiones se toman de manera colectiva. Dijo que Azcón debería aclarar su postura respecto al presupuesto, sugiriendo que podría estar buscando nuevas alianzas con otros partidos en vez de colaborar con Vox.

El portavoz de Vox manifestó que aún se espera la presentación del "techo de gasto" por parte del Gobierno de Aragón y pidió al PP que deje de "manipular" a la población. “Esta situación se asemeja más a un juego infantil que a una gestión seria”, comentó Nolasco, quien se mostró indignado por la presión ejercida sobre su grupo parlamentario.

Además, Nolasco calificó la reciente intervención de Azcón en el Parlamento como "una puñalada trapera", sugiriendo que podría estar buscando formas de adelantar las elecciones a costa de un manejo negativo de los presupuestos. Planteó la posibilidad de que el presidente no desee presentar un presupuesto que cuente con el apoyo de Vox, prefiriendo adoptar una postura de confrontación.

Destacó que si Azcón presenta un proyecto de ley, Vox podría respaldar medidas concretas que incluyan aspectos educativos y sanitarios, pero dejó claro que no se dejarán engañar por tácticas manipulativas del PP. Abogó por una mayor transparencia y por un acuerdo que no implique jugar a la política arriesgada.

Nolasco concluyó afirmando que cualquier negociación futura con el PP estará condicionada a su actitud hacia Vox. Manifestó que la falta de comunicación y de disculpas por parte de Azcón es una señal de desdén y que no se sentarán a negociar con alguien que actúe de manera "rastrera". El mensaje es claro: Vox espera un cambio real en el diálogo político que incluya respeto y sinceridad.