ZARAGOZA, 17 de diciembre.

El Gobierno de Aragón, en colaboración con el Ministerio de Agricultura, ha solicitado a la Comisión Europea el consentimiento para vacunar a un nuevo grupo de 30.000 vacas, pertenecientes a las Oficinas Comarcales Agrarias (OCA) de Boltaña, Jaca y Sabiñánigo, ubicadas en la frontera con Francia. Esta iniciativa se lleva a cabo ante el auge de casos de Dermatosis Nodular Contagiosa que se están reportando en el sur de Francia.

Las nuevas vacunaciones se suman a las que ya se están llevando a cabo en otras tres OCAs cercanas a Cataluña: Castejón de Sos, Tamarite de Litera y Graus, donde se han distribuido 80.000 dosis debido a recientes brotes en la provincia de Gerona, según declaró Aitziber Lanza, directora general de Calidad y Seguridad Alimentaria.

“Con estas tres OCAs adicionalmente formamos una barrera de protección junto a las otras que comenzamos a vacunar hace aproximadamente mes y medio”, oró Lanza.

La medida se implementa con carácter preventivo, buscando adelantarse a la posibilidad de que la enfermedad alcance al ganado, lo cual reafirma el compromiso de proteger la cabaña ganadera y asegurar la salud pública en un sector clave para el Pirineo de Huesca.

Lanza destacó que la situación en las tres OCAs de la frontera con Francia es “algo diferente” a las de Cataluña, ya que se trata principalmente de vacas nodrizas, muchas de las cuales se encuentran en áreas de pastoreo o pardinas, lo que podría complicar el proceso de vacunación. Sin embargo, confía en la “buena disposición” de los ganaderos para completar esta tarea “sin inconvenientes”.

La responsable ha informado que la campaña de vacunación avanza de manera positiva, con expectativas de que finalice entre finales de este mes y principios de enero, aunque ha reconocido que la llegada de las festividades navideñas ha ralentizado un poco los tiempos, complicando el proceso.

Respecto a las 30.000 dosis para las OCAs de Jaca, Sabiñánigo y Boltaña, Lanza ha afirmado que España cuenta con un suficiente stock de vacunas almacenadas, aguardando únicamente la autorización de Bruselas, que se espera sea otorgada en el lapso de una semana, para dar inicio a la administración de las inoculaciones “a partir de Reyes”.

El objetivo principal es establecer una muralla sanitaria frente a Francia, donde el virus se aproxima a Aragón, similar a la barrera que se erigió con Cataluña. Esta estrategia podría ir ajustándose según la evolución de la enfermedad, que es altamente contagiosa entre el ganado bovino. Lanza expresó su deseo de que “ojalá se detenga” la propagación y no se tenga que extender la vacunación a más OCAs. “La única forma de prevenir es creando una barrera sanitaria a través de la vacunación”, enfatizó.

“Estamos en una situación en la que contamos con vacunas para esta enfermedad, a diferencia de otros problemas que enfrentamos, y debemos aprovechar esta oportunidad: vacunar y prevenir, agradeciendo a los ganaderos por su colaboración, ya que su participación también implica ciertas restricciones en su movilidad, pero están contribuyendo al bienestar del sector”, reiteró.

El Ministerio de Agricultura es el encargado de adquirir las vacunas y distribuirlas a las Comunidades Autónomas, que asumirán los costos de la inoculación por parte de los veterinarios, una vez que la Comisión Europea brinde su aprobación.

Como parte de la estrategia informativa y de apoyo al sector ganadero, Aitziber Lanza, acompañada por Enrique Novales, jefe de servicio de Sanidad Animal, realizará una visita el próximo martes a las OCAs de Sabiñánigo, Jaca y Boltaña, en donde se reunirán con los ganaderos para detallar la campaña de vacunación, resolver inquietudes y transmitir un mensaje de confianza y seguridad.