La Real Academia Española celebró su tercer Pleno fuera de su sede en el Palacio de La Aljafería en Zaragoza y rindió homenaje a los filólogos Fernando Lázaro Carreter y Manuel Alvar.
El director de la RAE, Santiago Muñoz, destacó en la reunión la importancia del papel de la lengua española para la vertebración del país, donde Aragón tiene un lugar destacado. Muñoz subrayó que la última edición del Diccionario de Autoridades recoge unos 800 aragonesismos, hechos que refuerzan la importancia lingüística de esta comunidad para la Academia.
La lengua española es el elemento más importante para la definición de la nación, su cohesión y proyección al mundo, puntualizó Javier Lambán, presidente del Ejecutivo autonómico. El presidente también hizo hincapié en la importancia de mantener vivo y luciente el castellano y en la necesidad de que los académicos mantengan con entusiasmo y sabiduría la alta misión de ser guardianes del idioma.
Este tercer Pleno fuera de la sede de la RAE guarda la importancia de hacer llegar la Academia a las diferentes comunidades y proyectar el significado de la lengua española, señaló Muñoz. También destacó la importancia que Aragón tiene en la Academia, donde 29 aragoneses han pertenecido a la organización a lo largo de su historia.
El presidente del Parlamento de Aragón, Javier Sada, destacó la construcción del Palacio de La Aljafería a base de palabras por su primer propietario, el rey Yafar. Sada subrayó que el rey aragonés llevó el español hasta el último rincón de Aragón.
El Pleno también incluyó la presentación de obras de reciente aparición como 'Don Quijote de la Mancha o el triunfo de la ficción caballeresca', 'Santander, 1936', 'Oriente', 'Tiempo de espera', 'Revista Claves', y 'Leyendas de Gustavo Adolfo Bécquer', entre otras.
El Pleno también trató cuestiones relativas al español propio de Aragón. Los académicos aragoneses, Soledad Puértolas y Pedro Álvarez de Miranda, desarrollaron sus intervenciones sobre la presencia de voces de origen aragonés en las obras académicas, mientras que Salvador Gutiérrez Ordóñez profundizó en diversos aragonesismos.