En la ciudad de Zaragoza, el Ayuntamiento y la Fundación Federico Ozanam conmemoraron el trigésimo aniversario del exitoso proyecto de formación y empleo del Casco Histórico. Según la consejera municipal de Políticas Sociales, Marian Orós, esta iniciativa ha beneficiado a 1.339 personas en términos de empleabilidad e inclusión social a lo largo de las últimas tres décadas.

"El empleo es fundamental para la inclusión y el desarrollo personal. Es la clave para lograr la autonomía, establecer metas individuales y alcanzar una vida plena e independiente. En Zaragoza, creemos en políticas que fomenten la inclusión laboral en lugar de la asistencia social", expresó Orós, haciendo hincapié en que "la mejor política social es la creación de empleo".

En una ceremonia especial, la consejera entregó diplomas a los 50 participantes de la edición 2023/2024, destacando el apoyo financiero de 1.190.000 euros proporcionado por el Ayuntamiento.

El proyecto ofreció formación en albañilería y pintura, con un enfoque práctico. Los participantes realizaron 232 intervenciones en diversas áreas, beneficiando a viviendas familiares de escasos recursos, fachadas del Casco Histórico, y centros educativos del distrito.

Esta iniciativa ha tenido un impacto significativo en la inclusión social, la generación de empleo, la renovación urbana, y la mejora de infraestructuras públicas y viviendas de comunidades vulnerables.

Los participantes han llevado a cabo diversas mejoras en hogares particulares, como renovaciones en cocinas y baños, reemplazo de bañeras por platos de ducha para facilitar la accesibilidad, trabajos de pintura, instalaciones eléctricas, entre otras.

El proyecto de formación y empleo del Casco Histórico se originó en 1994 en el barrio de San Pablo, expandiéndose posteriormente a La Magdalena y finalmente abarcando todo el Plan Integral del Casco Histórico desde 2015.

En 2023, el Ayuntamiento de Zaragoza consolidó el proyecto mediante un acuerdo social con la Fundación Federico Ozanam, marcando un hito importante en su evolución.

A lo largo de estas tres décadas, los participantes han sido protagonistas de su proceso de inclusión laboral, contribuyendo de manera significativa a la mejora de su comunidad.

En total, se han llevado a cabo 6.300 obras en hogares con bajos recursos, 1.052 intervenciones en fachadas del Casco Histórico, y numerosas acciones en centros educativos, servicios sociales y entidades del territorio, demostrando el impacto positivo de este proyecto a nivel local.