La ciudad de Zaragoza se encuentra en un ambiente festivo y lleno de expectativas este 5 de enero, cuando Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente han aterrizado en la capitán aragonesa alrededor de las 16.00 horas. Venidos de "tierras lejanas", Melchor, Gaspar y Baltasar han llegado con la tradicional misión de repartir alegría y regalos para todos los niños en lo que promete ser una "maravillosa noche". La emoción aumentará a las 18.00 horas, cuando dé comienzo la esperada cabalgata que partirá del CEIP 'Joaquín Costa' y recorrerá las calles hasta llegar a la emblemática plaza del Pilar.

En el Paseo de los Bearneses del Parque Grande-José Antonio Labordeta, los tres Reyes Magos han tenido un emotivo encuentro con los niños zaragozanos. Allí, la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, les ha recibido con un mapa detallado del recorrido de la cabalgata, asegurando que sus visitas son siempre un evento muy esperado.

La Alcaldesa ha expresado su agradecimiento a Sus Majestades por elegir Zaragoza como destino en su gira anual y ha resaltado que "toda la ciudad está esperando este momento". Chueca ha enfatizado la alegría y la ilusión que un acontecimiento de tal magnitud genera entre los ciudadanos, creando un vínculo especial entre la tradición y la comunidad.

Chueca no ha dejado de recordar que los Reyes Magos provienen de "lugares remotos" y que hace 2024 años viajaron a Belén con la misión de llevar los mejores regalos al Niño Jesús. En un gesto de hospitalidad, ha solicitado a los Reyes que en su visita este año traigan "buenas noticias y alegría para todo el año", reflejando el deseo de bienestar y esperanza de los zaragozanos.

Por su parte, el rey Melchor ha manifestado su alegría al estar en Zaragoza y ver las sonrisas de los niños. Ha transmitido un mensaje esperanzador, anhelando que "la ilusión, la esperanza y la alegría iluminen las calles" de la ciudad en esta noche mágica.

Además, Melchor ha recordado la trascendencia de su visita, mencionando lo ocurrido "hace muchos años, en una maravillosa noche", cuando trajeron oro, incienso y mirra para el Niño Jesús. Cada uno de estos regalos tiene un profundo significado espiritual que se remonta a los valores de la tradición cristiana. Con esta evocadora reflexión, ha finalizado su mensaje deseando a todos una "feliz noche de reyes".