Crónica Aragón.

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"Empleadas de residencias rememoran el sufrimiento de Villafranca y exigen un convenio regional que valore su trabajo"

ZARAGOZA, 22 de noviembre. La conmoción sigue presente en la comunidad de Villafranca de Ebro tras el trágico incendio en una residencia de ancianos que costó la vida a diez personas. En este contexto, el sindicato OSTA ha llevado a cabo una concentración este viernes en Zaragoza, demandando a los políticos la implementación de un convenio colectivo autonómico que dignifique la labor de las trabajadoras del sector, quienes enfrentan condiciones laborales "bastante nefastas" según afirmaron representes del sindicato.

Los participantes, aún consternados por la tragedia reciente, se unieron en un emotivo minuto de silencio en homenaje a las víctimas. Este acto también fue un reconocimiento a la valentía de las trabajadoras de la residencia, en particular de las dos que, arriesgando su propia vida, intentaron salvar a varios de los residentes atrapados en el infierno del fuego. Además, se extendió una gratitud sincera hacia los Bomberos, la Guardia Civil y todos los efectivos que intervinieron en la emergencia que tuvo lugar hace ya una semana.

Ana María Meler, delegada sindical de OSTA y supervisora en la residencia Jardines de Villafranca, utilizó la ocasión para abogar por una revisión de las ratios de trabajadoras. Subrayó que debe haber un mayor número de empleados por turno para garantizar una atención adecuada. "Nunca se piensa que algo puede suceder hasta que realmente sucede, y en ese momento te sientes completamente desprotegido", expresó. Meler argumentó que si hubiera más personal disponible, la situación en los turnos podría ser mucho más eficiente y menos estresante para todos los implicados.

En su intervención, Meler no escatimó al expresar su "perplejidad y pena" ante el "circo mediático" que se ha formado a raíz de la tragedia, criticando las declaraciones públicas de quienes, según ella, no entienden la realidad del sector. En contraste, dijo, las trabajadoras han optado por mantener el silencio y centrarse en sus tareas, ayudando a los residentes y adaptándose a su nuevo entorno tras el traslado temporal de los afectados a Vitalia Huesca, a donde fueron reubicados después del desastre.

La supervisora alertó sobre el estado emocional de los residentes reubicados, quienes se sienten "desorientados" en el nuevo centro y añoran la oportunidad de pasear en los jardines de su antigua residencia. Según Meler, la adaptación a las nuevas normas y rutinas está siendo un reto para muchos de ellos.

Durante su alocución, Meler también dirigió críticas a la clase política por sus promesas incumplidas a lo largo de los años: “Las ratios son un tema que debe ser abordado por nuestros políticos y los sindicatos que participan en el diálogo social. Resulta bochornoso escuchar ciertas declaraciones cuando, desde 1992 y bajo distintos gobiernos, no se ha hecho nada para remediar esta realidad", enfatizó.

Continuando con su disertación, Meler acusó a aquellos que critican las ratios y las condiciones actuales de ser, en muchos casos, los mismos que han negociado o aprobado convenios estatales que no valoran ni dignifican el trabajo de las más de 13.000 personas que laboran en Aragón en este sector.

El desánimo y el malestar continúan creciendo entre las trabajadoras, quienes se enfrentan a una situación dignificada como “muy feminizada” y marcada por condiciones laborales “extremadamente precarias”. Meler destacó el exhaustivo trabajo que las trabajadoras llevan a cabo, que incluye cuidados, alimentación y atención en horarios complicados, y la constante presión de una falta de personal adecuada para atender a los residentes.

“No hay suficientes personas dispuestas a trabajar en este sector debido a su precariedad. Las condiciones son mediocres, los salarios son insuficientes y esto hace que durante períodos específicos, como en vacaciones, sea particularmente difícil completar los turnos,” se quejó Meler, subrayando la crítica situación del sector.

A partir de 2020, OSTA ya había propuesto una serie de medidas urgentes para mejorar el entorno laboral, recomendando una revisión de las ratios con un aumento proporcional en función del turno y la dependencia de los residentes. También se ha solicitado la implementación de un convenio colectivo que contemple todas estas mejoras.

Meler finalizó su discurso destacando la necesidad de reconocimiento y estabilidad en las plantillas para que pudiera ofrecerse el cuidado que los mayores y personas con dificultades mentales necesitan urgentemente. Hizo un llamado al Gobierno de Aragón para que modifique las normas actuales y promueva una mesa de diálogo que involucre a todas las partes interesadas en la creación de un marco digno para el cuidado de los dependientes en la región.