ZARAGOZA, 4 Feb.
El Museo de Zaragoza tiene dentro a su compilación un grupo de 12 pistolas de distintas formatos, fechadas entre los siglos XVII y XIX y que proceden de la industria armera guipuzcoana. Es una donación de Raquel Plaza Ara, de un grupo armamentístico con un increíble estado de conservación y un régimen ornamental impresionante.
Estas armas tiene 2 mecanismos de tiro distintas: la llave de chispa, mucho más vieja y complicada; y la de percusión o pistón, mucho más eficiente en la detonación de la carga. La vitrina donde se sitúan las pistolas puede visitarse en el paseo de exposición persistente en el arranque de la escalera monumental, han correcto desde el Gobierno de Aragón.
La industria armera guipuzcoana data de siglos atrás y su vida queda registrada ahora en el siglo XV, primero bajo organización gremial y más tarde como esencial foco de producción industrial. Sobresale el concejo de Éibar, cuyo avance estuvo relacionado siempre y en todo momento a esta actividad, y próximamente brotaron talleres y factorías en ciudades vecinas.
Cada uno de estos talleres tenía fabricantes y punzones distintas para detectar el producto, las pruebas a las que se había sometido --Banco de pruebas de Éibar-- y el año de fabricación.
Con este grupo de pistolas, el museo completa las compilaciones históricas de la Edad Moderna y la Edad Contemporánea, resaltando la larga y diferente compilación de la institución, que comprende desde la prehistoria al siglo XX y desde Aragón hasta Asia.
La riqueza familiar de este museo incluye asimismo compilaciones singulares, como las de etnología, cerámica y arte oriental. Asimismo, una gran parte de la ampliación de compilaciones hay que, como en un caso así, a ciudadanos en compromiso con el patrimonio, que donan o depositan obra en este centro público.
Por otra sección, hablamos de la primera ocasión donde el museo muestra armamento de este género, más allá de que tiene mucho más ejemplares diversos de trabucos y otras pistolas en área de reserva.