ZARAGOZA, 1 Feb.
La comisión excepcional de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado, con el acompañamiento del PP, Ciudadanos y VOX; y los votos contra el PSOE, Podemos y ZeC, el dictamen de la modificación apartada del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) sobre la parcela donde se posiciona al campo de fútbol de La Romareda y que dejará integrar 22.500 m2 de suelo comercial de un total de 42.500 m2 de una torre de 14 alturas que no se va a llegar a alzar, al paso que el resto se situarán en otra región de la región.
Esta aprobación inicial, que se volverá a someter a votación en el pleno para su aprobación determinante, se ha producido una vez que el Real Zaragoza y el Gobierno de Aragón presentasen rutas alegaciones a la aprobación que logró el pleno sobre la modificación parcial del PGOU y tras la que se abrió un intérvalo de tiempo de alegaciones, de la misma asimismo se genera en este momento la apertura de un tiempo de exposición pública.
Será en este período en el momento en que el PSOE logre integrar el informe elaborado por 2 catedráticos de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad de Sevilla y de Extremadura, Manuel García Ayuso Covarsí y Juan Monterrey Mayoral, respectivamente.
El resultado de este informe solicitado por el PSOE declara que la cesión del estadio de La Romareda a 40 años tendría un beneficio de 286 millones de euros y en el caso de ampliarlo a 75 años, como solicita la alegación del Real Zaragoza, llegaría a los 751 millones de euros.
Este estudio no se ha aceptado como alegación al presentarse fuera de período, indicó el asesor municipal de Urbanismo, Víctor Serrano, lo que ha supuesto que el concejal socialista, Horacio Royo, replicara que no lo podía enseñar hasta no comprender la alegación del Real Zaragoza efectuada por la asesora Idom donde se solicita explotar el campo de fútbol a lo largo de 75 años, a través de la fórmula de derecho de área, a fin de que sea productivo la inversión sosprechada de unos 140 millones de euros.
Esta tramitación se efectúa por trámite de urgencia y se permite un período de 15 días para regresar a enseñar alegaciones a esta modificación del PGOU.
En su intervención Serrano ha aludido al "increíble nivel de transparencia" sobre los puntos susceptibles de enfrentamiento, como es la alegación del Real Zaragoza y el tiempo de explotación del campo y para lo que el Gobierno de la región ha pedido un informe a la Universidad de Zaragoza que acredita la intención del club de fútbol.
Esta alegación apunta que el Ayuntamiento guarda la potestad íntegra del campo de fútbol con independencia del modelo de explotación, y deja poner los condicionantes en la licitación que se saque. "El interés público continúa intacto", ha recalcado.
De la alegación del Gobierno de Aragón, ha comentado que no da sitio pues se demandan derechos de propiedad de múltiples viales del ambiente de La Romareda que, si bien el Ejecutivo autonómico tuviese razón, no obstruye esta modificación del PGOU.
Serrano ha subrayado que esta inversión se va a hacer con financiación privada sin que cueste un euro a los ciudadanos, en frente de otros intentos que han fracasado por carecer de impulso financiero.
El representante de VOX, Julio Calvo, ha comentado todos estos estudios "obvian múltiples situaciones, sabiendo además de esto que es una operación de altísimo peligro que está doblegada a muchas incertidumbres anteriores".
Al respecto, dijo que la deuda anterior con la que parte el Club de 45,5 millones de euros, que habría que amortizar de la misma los 140 millones de euros de inversión sosprechada. Ha alertado de que la coyuntura económica global logre empeorar, que los costos de la inversión se acrecienten por la subida de la inflación; y que el Real Zaragoza no consiga los desenlaces de deportes deseables, ni el número de asociados previstos.
Asimismo, ha estimado que se puede ofrecer el en el caso de que no logre arrendarse toda la área sosprechada de usos terciarios; y que no se festejen los macroeventos previstos.
"Hay otros costos de ocasión --ha añadido Calvo-- que naturalmente vamos a deber de tener en consideración en el momento de hacer más simple o no esta inversión". Así, ha mencionado la celebración del Mundial de 2030; el retorno popular que tendría por la reactivación económica vía generación de empleo; el coste de ocasión, si se impide el emprendimiento y sigue el presente campo; los capital por canon al Ayuntamiento que en este momento no se perciben; el mayor volumen de capital por turismo; y la contrariedad para capturar nuevos inversores para revitalizar el equipamiento deportivo.
El representante del conjunto municipal de Podemos, Fernando Rivarés, ha pedido una explotación a través de sociedad mezclada --Ayuntamiento de Zaragoza-Gobierno de Aragón y Real Zaragoza-- que explote el campo y la localidad del deporte sin costo para las arcas municipales. Ha lamentado que este modelo, como el de San Mamés, no se realice pues "se sacrifican los intereses de la región y se cuidan los de otros".
Esta fué uno de las causas que ha supuesto que Podemos haya votado en contra, en vez de a favor como en la votación previo a la presentación de las alegaciones.
El representante de ZeC, Pedro Santisteve, ha criticado que se pone puente de plata al Real Zaragoza por entregar 75 años la explotación del estadio y "después regresará en estado ruinoso a la localidad". Ha preguntado por qué razón no se ha pedido a los catedráticos de la UZ que afirmaran como es productivo a 50 años la explotación del campo de fútbol.
El concejal del PSOE, Horacio Royo, dijo que el Gobierno de la región "jamás ha amado el acuerdo" pues en tal caso "se habría contado la realidad de sus pactos en la sombra".
Royo ha recalcado que la explotación es "troncal" pues es donde "está el meollo" y los hechos dan la razón al PSOE por el hecho de que "contaron la realidad con la alegación del Real Zaragoza". "Se da la transmisión del a propiedad del vuelo y del subsuelo, esto es, del estadio y de lo que albergue en los bajos, al Real Zaragoza por 75 años y es incuestionable según la ley del suelo", ha remachado el edil.
A su parecer, va a ser un óptimo negocio para los inversores, pero no para la localidad, que va a recibir un canon de 500.000 euros por el nuevo estadio, que ha calificado de "limosna". A los 40 años seria "productivo", pero el llevarlo a 75 años piensa "dejar de fomentar un emprendimiento público para fomentar un genuino pelotazo, un negocio despiadado, de personas muy próximas al alcalde, con el patrimonio de todos y cada uno de los zaragozanos. Esa es la realidad de todo este tema".